Gertz se tambalea y afecta la imagen de la Corte
Libertad bajo palabra

Periodista y abogado con más de 35 años de trayectoria. Reportero, comentarista y consultor experto en temas jurídicos. Premio Nacional de Periodismo José Pagés Llergo 2011. Especialista en el Poder Judicial de la Federación y analista político.

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Gertz se tambalea y afecta la imagen de la Corte
AMLO, celebra a la SCJN en el caso Gertz. Foto: Especial

El presidente de la República y el Senado, dominado por Morena, permiten que el fiscal General de la República pervierta al sistema de justicia, devaluado por complicidades, amenazas y trueques. 

Para Andrés Manuel López Obrador es legítimo que el fiscal general utilice su posición para incidir en los procesos sobre la muerte de su hermano Federico, que asegura fue un homicidio. Con esa justificación se obsequia impunidad al inquisidor.

Las conversaciones telefónicas espiadas han abierto un nuevo frente de crisis a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), que se vio forzada a realizar un control de daños durante la sesión privada del lunes 7 de marzo. Según la versión de uno de los asistentes consultados por esta columna, el ambiente no fue terso para analizar el maltrato verbal de Gertz, quien con lujo de soberbia expuso su margen de operación ante el Tribunal constitucional.

Los ministros valoraron la reacción institucional respecto a las grabaciones, acordaron no hacer declaraciones personales sobre el tema y con opiniones divididas aceptaron emitir un escueto comunicado, sin referirse concretamente a las circunstancias que lo originaron. El boletín de un párrafo se supervisó desde la oficina de Arturo Zaldívar y reiteró una obviedad que evitó responder directamente a las bajezas expuestas en las llamadas.

Se dijo que el único compromiso del alto tribunal “es con la Constitución y los derechos humanos. Todos los asuntos de la competencia de la Corte se resuelven con independencia, imparcialidad y transparencia” se leyó en dos de los cuatro renglones del comunicado 072. 

¿Por qué tendría la Corte que comunicar un boletín tan general en la coyuntura de las llamadas espiadas, si no se supiera que son reales y comprometen a varios integrantes del pleno, entre ellos a su presidente y al ponente del caso? Entre líneas, el párrafo oficial trata de mitigar la sacudida respeto a las posibilidades de que Alejandra Cuevas Morán sea liberada, tras su encarcelamiento por el presunto homicidio del hermano de Gertz Manero, a discutirse a partir del próximo lunes con el proyecto del amparo en revisión 540/2021 que consta de 111 fojas y cuyos resolutivos fueron conocidos de forma irregular por el fiscal hace una semana.

No es un secreto que titulares de la entonces PGR, consejeros jurídicos de la presidencia, legisladores, gobernadores, integrantes del gabinete federal y poderosos litigantes han expuesto casos de su interés en las oficinas del tercer piso de Pino Suárez 2. Esa es la naturaleza del llamado alegato de oreja que algunas ponencias admiten. Sin embargo, el ingrediente diferencial son las expresiones comprometedoras escuchadas en voz de Gertz, revelando intercambios inadmisibles que por intimidación o cercanía podrían comprometer la objetividad e imparcialidad de algunos togados. 

Es ilustrativo conocer los antecedentes y las coyunturas. Alberto Pérez Dayán es uno de los ministros mencionados en las grabaciones y ponente del caso. Se ostentaba hace cuatro años como el vicepresidente de la Corte, una posición que no existe, pero que denotaba mucha cercanía y complicidad con Luis María Aguilar Morales, antecesor de Arturo Zaldívar. 

Durante el sexenio anterior, Pérez Dayan se distinguió por saber pedir y otorgar favores, muestra de ello fue la plaza de alto rango que el exconsejero jurídico de la Presidencia con Enrique Peña Nieto otorgó al hijo del ministro, que siendo pasante fue incorporado a la oficina de Humberto Castillejos Cervantes en 2013. En el periodo de Misha Granados Fernández, el hijo del ministro fue promovido tras obtener su título profesional, Alberto Pérez Canales llegó a ser jefe de la Oficina del Consejero Jurídico, justo en el despacho donde se litigan los asuntos del Ejecutivo ante la Suprema Corte. Era la época de mayor poder para Aguilar Morales y su incondicional. 

Es conocida al interior del Poder Judicial la animadversión de Zaldívar hacia Aguilar Morales y Pérez Dayán, lo que da sentido a lo que Gertz dice haber escuchado del presidente de la Corte respecto a la poca confiabilidad del ponente en el caso de Laura Morán y Alejandra Cuevas. 

Sobre Luis María Aguilar se realiza una indagatoria de su administración por presuntas irregularidades administrativas y aparentes actos de corrupción que le involucraría. Existe una carpeta de investigación en la FGR que pone en estado vulnerabilidad al expresidente de la Corte ante Gertz, además del enfado manifiesto del fiscal por el incumplimiento de un supuesto acuerdo con Pérez Dayán, referido en las grabaciones filtradas.

Loretta Ortíz Ahlf, la ministra recién llegada y exlegisladora federal de Morena, está casada con José Agustín Ortiz Pinchetti, quien fue designado en febrero de 2019 por Gertz, titular de la Fiscalía Especializada de Delitos Electorales.   

Un excolaborador muy cercano a Alfredo Gutierrez Ortiz Mena tiene causas pendientes sobre temas delicados que operó en el SAT y podrían revivirse con fuerza.

Hace unas semanas trascendieron las investigaciones sobre Carlos Alpizar, secretario de la presidencia en el Consejo de la Judicatura Federal, y Alejandro Ríos Camarena, quien era secretario Ejecutivo de Administración de esa institución. Las denuncias hacia ellos se materializaron en carpetas que también llegaron a la fiscalía de Gertz, que habría tocado el tema con Zaldívar.  

El inquisidor se tambalea, dice ser víctima de una “extorsión mediática criminal” por el espionaje e intercambia a placer su posición de poder con la de un tercero interesado en el asunto de su hermano.

Son muchos y variados los vasos comunicantes con la Suprema Corte, solo con resoluciones blindadas de sospechas, los ministros podrán revertir la onda expansiva que les ha alcanzado en el más indignante escándalo de la procuración de justicia en México.

EDICTOS

No son los conservadores, sus adversarios o lo que usted llama “golpismo mediático”, señor presidente. El fiscal que colocó en una institución que en teoría es de buena fe, se aprovecha de su posición para satisfacer venganzas personales. Es claro que los ajustes de cuentas entre Julio Scherer Ibarra, Santiago Nieto Castillo y Alejandro Gertz Manero todavía tendrán episodios por delante. El espionaje y las confrontaciones entre los que son o fueron cercanos al primer círculo de López Obrador son como la serpiente que devora su propia cola. 

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