Cristiano Ronaldo, liderazgos positivos y eternidad

Cristiano Ronaldo (CR7) es un futbolista nacido en Madeira, Portugal el 5 de febrero de 1985. Con un instinto extraordinario para convertir goles, es un jugador que domina diversas facetas del deporte más popular del mundo, que tiene un estimado de 4 mil millones de seguidores. Entre la cantidad descomunal de logros que este futbolista ha logrado conquistar a lo largo de su carrera, por cuestiones de espacio solamente se destacan los siguientes:

• Campeón en las tres ligas más importantes del mundo (Premier League de Inglaterra con el Manchester United, Liga de España con el Real Madrid y Serie A de Italia con la Juventus).
• Campeón de la Eurocopa con la Selección de Portugal.
• Cinco veces ganador del Balón de Oro (máximo premio individual al que puede aspirar un futbolista).
• Máximo goleador de selecciones con 115 goles.
• Máximo goleador en la historia de la Champions League con 141 goles (el torneo de clubes más prestigioso del mundo).
• Máximo goleador en la historia del Real Madrid con 450 goles (el club deportivo más laureado en cualquier deporte en el mundo).

Es parte del camino de éxito recorrido por muy pocos deportistas en el mundo. No conforme con lo anterior, el pasado 12 de marzo rompió el que seguramente será su récord más recordado y difícil de superar: se convirtió en el máximo goleador en la historia del futbol profesional con 807 goles, dejando detrás a otros futbolistas totales como Lionel Messi y Pelé.

A partir de esta semana, se podrá encontrar que lo más cercano a un sinónimo de la palabra gol es CR7, mismo que a la par de los goles que seguramente seguirá anotando, acrecentará su leyenda y la lucha que tendrá en la soledad de la cima contra sí mismo. 

Sobre la cada vez menos frecuente presencia del gol dentro del futbol, Eduardo Galeano afirma que “el entusiasmo que se desata cada vez que la bala blanca sacude la red, puede parecer misterio o locura, pero hay que tener en cuenta que el milagro se da poco”. En estos tiempos, Cristiano Ronaldo es el modelo claro de un disruptor, pues actuando aún en contra de la tendencia contemporánea de que el gol es cada vez más escaso, este futbolista los sigue haciendo y en cantidades brutales.

Además, su ejemplo aporta las pruebas fehacientes de que el esfuerzo y la disciplina pueden hacer que cualquier persona logre lo que se proponga, siendo el límite precisamente aquello que se plantea.

Ídolos entre los que se puede contar, por ejemplo, a Michael Jordan, a Serena Williams, a Tom Brady, a Usain Bolt, a Simone Biles, a Michael Phelps o a Babe Ruth, evidentemente surgen pocos. Sin embargo, en una época en la que proliferan los líderes carismáticos se puede valorar aún más a este tipo de líderes que no solo son funcionales, sino que pueden fungir como buenos ejemplos para toda la humanidad.

Aquellos liderazgos que han explotado los aspectos negativos existentes dentro de toda sociedad tienen posibilidades de lograr sus objetivos personales, pero también es indubitable que son los liderazgos construidos con base en la exaltación de los aspectos positivos de la sociedad (como lo es el deporte) los que trascienden y no solamente cumplen con objetivos personales, sino que son capaces de brindarle a la sociedad momentos de plenitud a la generalidad, en lugar de recordarle las cosas malas de la vida.

Acudiendo otra vez a Galeano, y en referencia a los ídolos en el futbol, señala: “la pelota ríe, radiante, en el aire. Él la baja, la duerme, la piropea, la baila, y viendo esas cosas jamás vistas sus adoradores sienten piedad por sus nietos aún no nacidos, que no las verán”.

Los CR7 son escasos como lo son los ídolos y el gol, pero al contrario de los líderes negativos que parecen proliferar, se trata de personajes eternos que se convierten en paradigmas para el porvenir.