En los últimos años la producción teatral en México ha despuntado de una manera espectacular, lo mismo se presentan grandes producciones apoyadas por empresarios, obras auspiciadas por instituciones culturales que, puestas en escena independiente, uno de los directores que ha sembrado semillas de todo tipo en esos terrenos es Diego del Río, un apasionado de contar historias a partir de la tercera llamada.
Con más de 30 obras lo mismo como director, que, como traductor, Diego del Rio pareciera no tener miedo a ningún tipo de trama, ya que, apuesta por la esencia humana, esa que es tan potente y diversa.
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Otro de los rasgos que llaman la atención en la carrera de Diego del Río es el abanico de intérpretes con los que ha trabajado, tales como Ana Ofelia Murguía, Ricardo Blume, Diana Bracho, Blanca Guerra o María Rojo, Ludwika Paleta. Adriana Llabrés, Susaa Zavaleta, Enrique Arreola, Arcelia Ramírez y Marina de Tavira, distintas personalidades que han ampliado sus rangos para ofrecer obras que siguen siendo memorables.
Pienso que la personalidad de Diego ha abonado mucho a abordar esa diversidad de temáticas, sin duda es un hombre con un temple que dota de armonía los espacios de trabajo, ensayos o los mismos estrenos, algo que a quienes lo hemos visto en acción representa una experiencia vital.
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Entre las obras que ha abordado se encuentra “Todos eran mis hijos”, obra de Arthur Miller que se estrenó en Broadway en 1947 con funciones casi un año completo. Una pieza robusta que Miller escribió para sacarse la espinita de su puesta en escena anterior a la que no le fue muy bien, se dice que aseguró que si “Todos eran mis hijos” no funcionaba, se dedicaría a otra cosa y fue un trancazo.
Cargada de dilemas morales, “Todos eran mis hijos” nos presenta a un exitoso hombre de negocios que tiene un pasado oscuro en el que fue proveedor del ejército norteamericano durante la Segunda guerra mundial, transacción que fue envuelta en una tragedia.
Acompañado de un gran elenco encabezado por Arcelia Ramírez, Diego del Río se embarcará en una caravana el próximo 18 de octubre para presentar dos funciones en Casa Ceiba en Oaxaca.
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Un esfuerzo que espera tocar profundo a los asistentes en Privada de prolongación venus, L8 en la colonia La cascada, los boletos podrán conseguirlos a través de WhatsApp 5553345405.
A propósito de esas funciones especiales, tuve oportunidad de platicar con Diego del Río sobre esta puesta en escena. sus inicios, el cine y su faceta como docente, pasen y denle clic https://we.tl/t-mIQnhDxLG0