Drácula, Luc Besson nos presenta la adaptación más romántica de la clásica novela de Bram Stoker

Miércoles 20 de agosto de 2025

Simón Sánchez
Simón Sánchez

Guionista con más de 20 años de experiencia, amante del buen cine y de las grandes series de televisión.

Drácula, Luc Besson nos presenta la adaptación más romántica de la clásica novela de Bram Stoker

Porque nunca habrá suficientes versiones de la historia del vampiro original.

dracula.jpg

La nueva adaptación de Drácula.

/

Imagen: captura de pantalla.

En la Rumanía del siglo XV el príncipe Vlad II (Caleb Landry Jones), también conocido como el Conde Drácula, vive un romance idílico con su esposa, la princesa Elisabeta (Zoë Bleu Sidel), mientras su pueblo está en medio de una guerra en nombre de Dios contra los musulmanes, al ganar una batalla Vlad se entera que su esposa fue emboscada por el enemigo, él sale en su búsqueda solamente para presenciar su asesinato. Esta tragedia lo convence de que Dios no esta de su lado, como represalia mata a su sacerdote e insulta a Dios, con esto se gana la maldición de vivir para siempre, dependiendo de la sangre humana para sobrevivir.

Cuatro siglos después, el Conde sigue con la esperanza de encontrar la reencarnación de su amada, al tiempo que recibe la visita de un joven abogado Jonathan Harker (Ewens Abid). Mientras en Paris, un Sacerdote (Christoph Waltz), que pertenece a una orden que ha estado casando vampiros por siglos, se encuentra con una vampiresa que está al servicio de Drácula, María (Matilda de Angelis), ella descubre que Elisabeta reencarno en una tierna joven llamada Mina, novia del abogado. Empujado por el amor y la obsesión, el Conde decide seducirla sin importar las terribles consecuencias que pueda desatar.

Te puede interesar: Muy lejos, película española acerca de la inmigración en medio de la crisis económica de 2008

El veterano director francés Luc Besson (El quinto elemento, 1997, El Perfecto Asesino 1994) nos presenta su versión de Drácula, la clásica novela de Bram Stoker, que además de dirigir, escribió el guion, haciendo una adaptación libre, donde nos presenta un Conde mucho más obsesionado por el amor de su esposa muerta que, por la sangre humana, que solamente usa para sobrevivir. La premisa de la historia original se mantiene lo suficiente como para que a los miles de fanáticos del personaje no resulte desconocida, este es un Drácula distinto, paradójicamente, más humano. La principal diferencia con las varias versiones que se han hecho de este clásico es que Besson privilegio la historia de amor por sobre la tradicional historia del vampiro sanguinario y violento, él crea un Conde que está dispuesto a hacer hasta lo imposible por el amor de su vida, además de omitir el personaje de Van Helsing, y sustituirlo por un sacerdote cazavampiros, es decir, un Drácula nunca visto.

Hablando del reparto, Besson se apoyó en un viejo conocido para interpretar al Conde Drácula, el actor estadounidense Caleb Landry Jones, quién en 2023 había protagonizado para el director la película Dogman, y como en aquella ocasión, nos entrega un personaje solido y muy bien desenvuelto, principalmente en la versión joven y apasionada de Vlad II. En el doble rol de Mina y Elisabeta está Zoë Bleu Sidel, quien no desentona y claramente esta a la altura de la historia. Por su parte el que se destaca es el alemán Christoph Waltz, como el sacerdote cazavampiros, quién, como nos tiene acostumbrados, nos entrega una gran actuación.

Visualmente la película se ayuda de una propuesta muy rica y opulenta, que estéticamente mezcla una escenografía barroca con lo teatral, casi operístico. Esto sin mencionar lo maravilloso que resulta el vestuario y un diseño de producción que no escatimo en el presupuesto.

Drácula está disponible en cines.

PUBLICIDAD