Doctora en Comunicación y Pensamiento Estratégico. Dirige su empresa BrainGame Central. Consultoría en comunicación y mercadotecnia digital, especializada en tecnología y telecomunicaciones. Miembro del International Women’s Forum.
El internet está en riesgo
Mientras se implementan nuevos protocolos de seguridad en las “puertas” de internet, como usuarios digitales debemos tomar medidas para proteger nuestros datos.
Mientras se implementan nuevos protocolos de seguridad en las “puertas” de internet, como usuarios digitales debemos tomar medidas para proteger nuestros datos.
Era 1989 cuando los ingenieros Yakov Rekhter, Kirk Lougheed y Len Bosack desarrollaron el Protocolo de Puerta de Enlace de Frontera (BGP, por sus siglas en inglés), un sistema de gestión que actualizaba una versión anterior del “mapa de ruta” de internet. Internet puede compararse con una enorme carretera de redes interconectadas que enlazan lugares diferentes por donde viajan datos que necesitan llegar a su destino de manera segura y rápida.
Aunque parezca increíble y a pesar de las amenazas actuales a la ciberseguridad, hoy este protocolo sigue siendo el pilar del funcionamiento de internet, pese a haberse comprobado a lo largo de los años que es un sistema vulnerable y que su inseguridad lo ha posicionado como el lugar favorito para el robo de información, espionaje y manipulación de datos. Afortunadamente, diferentes gobiernos, como el estadounidense, han empezado a implementar medidas para fortalecerlo y proteger la infraestructura crítica de internet mediante la “hoja de ruta de la ciberseguridad”, cuyo objetivo principal es fortalecer la prosperidad económica y la seguridad nacional de dicho país.
La Casa Blanca hizo recientemente un llamado para que el mundo entero adopte tecnologías de vanguardia como Infraestructura de Clave Pública de Recursos (RPKI), una solución que verifica criptográficamente la propiedad de bloques de direcciones de IP para que solamente redes autorizadas puedan direccionar los datos que viajan en internet a rutas específicas, reduciendo significativamente las ciberamenazas y el robo de datos e, incluso, evitando la interrupción de sistemas de seguridad crítica dentro de la red. La hoja de ruta propone además identificar desafíos de seguridad, promover mejores prácticas, tecnologías de autenticación y colaborar con entidades gubernamentales y privadas para garantizar la resiliencia de la red.
La adopción de las medidas propuestas debe realizarse de manera colectiva por los operadores de red, incluidos distribuidores de servicios (ISP), operadores de redes móviles, proveedores de servicios en la nube, distribuidores de contenidos, operadores de redes de infraestructuras críticas, redes empresariales de todo tipo, gobierno y academia, así como gobiernos estatales, y locales. La inseguridad actual en la red afecta ya a todo tipo de proveedores de servicio de internet, empresas y organizaciones de todos los tamaños, incluidas escuelas, bancos, hospitales, etcétera, impactando sus operaciones y representándoles un gasto significativo para tratar de asegurar su infraestructura de seguridad de red.
Resulta sorprendente que, a pesar de los numerosos ataques sufridos, muchas empresas globales aún no hayan acelerado la implementación de soluciones RPKI para evitar la filtración masiva de datos sensibles como número de tarjetas de crédito y cuentas bancarias, así como información personal de sus usuarios. Asimismo, todos los días escuchamos cómo perfiles en redes sociales son hackeados para utilizar las plataformas de mensajería para extorsión y solicitar dinero a los contactos de los agredidos.
Mientras se implementen nuevos protocolos de seguridad en las “puertas” de internet que direccionan hacia dónde deben viajar los datos de manera segura, como usuarios digitales debemos tomar medidas para proteger nuestros datos:
- Usar contraseñas fuertes y únicas para cada plataforma, y mejor aún si te apoyas de gestores de contraseñas para que se te guarden en tus dispositivos y no sufras por no acordarte de ellas.
- Por tu bien, habilita la autenticación de dos factores como una capa extra de seguridad para que, si tratan de hackear tu cuenta, el sistema te avise antes de que logren entrar y tengas tiempo de cambiar tu contraseña de inmediato.
- En la medida de lo posible no utilices redes públicas, no son seguras.
- Aunque te de flojera, lee los términos de privacidad en cada plataforma y revisa a quién le dan permisos de uso de tus datos.
- Y, por último y no menos importante, mantén actualizado el software de tus dispositivos, para que tengan más capas de protección para tus datos.
Desde hace años, internet está en riesgo y es imperativo que tanto gobiernos como usuarios actúen para reducir su vulnerabilidad a ciberataques. No podemos seguir navegando con tranquilidad en una red expuesta a tantas amenazas. No esperes a que las grandes empresas tecnológicas o los gobiernos implementen nuevas medidas de seguridad digital. Proteger la integridad de nuestros datos es una responsabilidad compartida que empieza con acciones personales. Adoptar medidas básicas de seguridad, como las mencionadas, puede marcar una diferencia significativa para crear un ecosistema digital más seguro para todos.