Ozempic, el medicamento que las redes sociales convirtieron en milagro

“Quiero compartir mi experiencia con Ozempic”. Así tituló Guadalupe* el primer video en su cuenta de TikTok, donde lleva un registro del uso del medicamento. El tratamiento lo usa por su condición de salud, tiene 53 años, es prediabética e hipertensa, vive en sobrepeso y sus rodillas le gritan con reclamo los kilos que cargan.

No se automedicó, la médico internista que se lo prescribió tiene una clínica especializada en bypass gástrico y manga gástrica. Cuando le recetó el medicamento inyectable le dijo que era el último recurso que tenía para bajar de peso, Guadalupe se sometió a una cirugía de manga gástrica y a los dos años recuperó todo el peso que había bajado.

La única objeción que tenía el medicamento, le dijo, era el precio. En el mercado mexicano, Ozempic tiene un costo de 5 mil 084 pesos en farmacia. Guadalupe lo consideró, habló con sus dos hermanas y, en conjunto, decidieron costear el tratamiento.

El principio activo de Ozempic es la semaglutida y está indicado para mejorar los niveles de azúcar en sangre y para reducir el riesgo de eventos cardiovasculares. Su presentación es en una pluma precargada, la dosis es semanal y puede inyectarse en el abdomen, el muslo o el brazo.

La agencia de Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) aprobó Ozempic como un tratamiento para la diabetes tipo 2 en 2017. Como corresponde a todo medicamento, en su información incluye sus advertencias: efectos en el sistema digestivo, síntomas de pancreatitis, hipoglucemia, empeoramiento de retinoplatía y, en algunas ocasiones, el riesgo de desarrollar tumores en la glándula tiroidea. Si se lee hasta el punto final de la lista de los efectos adversos, entre el dolor de estómago, el estreñimiento y los gases se puede ver la frase: “pérdida de peso”. 

Guadalupe pensó que era su última oportunidad para llevar una vida saludable y le dijo que sí al medicamento. Empezó con el tratamiento en junio de 2022, sacó una cuenta de Tiktok y el 21 de junio comenzó a registrar sus avances. Cada martes, de manera puntual, sube su registro. Actualmente tiene más de 30 videos que narran su experiencia.

No es la única. De boca en boca o de TikTok en TikTok, las personas han convertido a Ozempic en un medicamento milagro para bajar de peso. 

Bajar de peso como objeto del deseo

¿Cómo comenzó a dispersarse que Ozempic era un medicamento “milagroso” para la pérdida de peso? ¿Pasó de boca en boca? ¿Se viralizó en redes sociales? ¿Los famosos tuvieron algo que ver?

Bajar de peso no puede ser considerado una tendencia cuando en todos los tiempos ha existido ese deseo. Es común haber optado por dietas, remedios, rutinas, sustancias que inhiben el apetito o cualquier otra cosa que prometa el efecto deseado.

En tiempos como los actuales, temas como la gordofobia, el deseo por la estética perfecta y lo que prometen las redes sociales con la exposición pueden hacer que bajar de peso sea un objeto del deseo a toda costa, incluso de probar un medicamento no aprobado para ese uso. 

De la influencia de personajes de alta exposición, se cuenta con el registro de un tuit de Elon Musk. El magnate, inversor y líder de Tesla, con 134 millones de seguidores, respondió a un mensaje en Twitter donde le señalaban que había perdido peso y lo alentaban a seguir con el trabajo. El comentario iba acompañado de dos fotografías donde se podía ver el antes y el después.

Musk respondió que había perdido 30 libras, poco más de 13 kilos y medio. En un tuit posterior compartió su secreto: “Ayuno + Ozempic/Wegovy + sin comida sabrosa cerca de mí”.

Se ha especulado que más personajes famosos usan el medicamento. Se le atribuyó su uso a Kim Kardashian cuando apareció en la Met Gala en un vestido diminuto que perteneció a Marilyn Monroe. De Kyle Richards también se dijo que lo usaba, pero ella lo negó y People expuso mostrando argumentos del arduo trabajo para mantener su figura. A la actriz Mindy Kaling se le acusó de organizar “Ozempic parties” con amigos, al menos así lo refiere un texto publicado en Glamour UK.

Por otro lado, la comediante estadounidense Chelsea Handler compartió en el podcast Call her daddy su experiencia con el medicamento. Se lo recetó un médico para bajar cinco libras —poco más de dos kilos— y cuando comenzó con los efectos adversos de Ozempic descubrió que era un tratamiento para la diabetes tipo 2. Dejó de usarlo y calificó su uso como “irresponsable”.

Las redes sociales han jugado un papel importante en su viralización. Existen una gran cantidad de grupos de apoyo en Facebook. Los videos en Instagram también abundan, pero probablemente la red que más efecto ha causado es TikTok, donde la etiqueta #ozempic cuenta con más de 800 millones de visualizaciones.

¿Y los efectos secundarios?

Las personas pueden leer o no sobre los efectos secundarios o adversos de cualquier medicamento y después decidir sobre tomarlos o no hacerlo. Sin embargo, la confianza en que todo irá bien puede jugarte a favor a menos que suceda lo contrario.

En la página de Ozempic para Estados Unidos se establecen efectos secundarios graves como posibles tumores en la tiroides e incluso cáncer. La página advierte que en los resultados realizados con roedores, Ozempic y otros medicamentos de la misma actuación causaron dichas consecuencias.

El medicamento tiene otras alertas si se tiene problemas en el páncreas o retinopatía diabética. También se describen efectos secundarios graves como la hipoglucemia, problemas renales o problemas en la vesícula biliar. Por otro lado, se indica que los efectos secundarios más comunes pueden incluir náuseas, vómito, diarrea, dolor abdominal y estreñimiento.

La página del medicamento para España presenta la misma información, pero en distinta distribución. En los efectos adversos frecuentes tienen una lista que entre el cansancio y la disminución del apetito marcan la pérdida de peso.

México debería tener su propia página de información, sin embargo esta no existe. El laboratorio Novo Nordisk explicó vía correo a La-Lista que, según los lineamientos de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), está prohibida la publicidad y el marketing directo con el paciente, por tanto, la información de los productos se dirige de forma directa a los médicos con capacidad de prescripción.

Cofepris tiene un documento fechado en febrero de 2020 donde incluye Ozempic como un medicamento biotecnológico innovador, indica que su denominación genérica es la semaglutida y expone que la indicación terapéutica es “como monoterapia o terapia de combinación con otros medicamentos para el tratamiento de la diabetes mellitus tipo 2 en adultos, en complemento a la dieta y el ejercicio”. Tiene el registro sanitario con el número 096M2019 con vigencia al 3 de julio de 2024.

“Este medicamento se está vendiendo como producto este milagro, ¿qué significa? Que son medicamentos que no tienen registros sanitarios, que no está aprobado su uso, en este caso para bajar de peso. Solamente está aprobado tanto por la Cofepris en nuestro país para controlar la diabetes o los niveles de glucosa en pacientes diabéticos no controlados principalmente. La FDA, que es la instancia que autoriza o registra todos los medicamentos en Estados Unidos, tampoco está autorizando este este medicamento para bajar de peso”, dice Adela Alba Leonel, académica de la División de Estudios de Posgrado de la Facultad de Medicina, su especialidad en farmacoepidemiología.

¿Las consecuencias de usar un medicamento que no está autorizado para ese fin? “Ningún medicamento podemos decir que es inocuo, en realidad todos los medicamentos, así como nos curan una cosa y nos dañan otra”. Los medicamentos se prescriben según las enfermedades que se tienen, los antecedentes y la presencia de las enfermedades heredofamiliares. 

Medicamentos como Ozempic no son controlados. Sobre ello, la farmacoepidemiologa hace un llamamiento a “generar esta cultura y empoderar a la población sobre que no debe de automedicarse”.

La especialista refiere que bajar de peso no sólo es una moda por las condiciones de salud, sino por un tema de “estética” e indica que la farmacovigilancia depende de todos y no sólo de dependencias como Cofepris. “La población tiene que apoyar y contribuir a que prácticas no deseadas o prácticas no autorizadas se reporten de hecho”.

Guadalupe confirma que, aunque es para tratar la diabetes mellitus tipo 2, ella ha experimentado que el medicamento le quita el hambre. Para ello hay una explicación.

La semaglutida es un medicamento que se conoce como agonista del péptido similar al glucagón tipo uno (GLP-1). La GLP-1 es una hormona que pertenece a la familia de las incretinas, su labor es sintetizar las células L del intestino (que absorben los nutrientes de los alimentos y los convierten en energía). La hormona es secretada en respuesta a las comidas, al aumentar la secreción pancreática de insulina en respuesta a la glucosa, regula la cantidad de glucosa en sangre y suprime el apetito, además de retrasar el vaciamiento gástrico y estimular la saciedad.

Ozempic face

Paul Jarrod Frank, un dermatólogo de Nueva York, acuñó el término “Ozempic face” o “cara Ozempic”. El New York Times lo relata: Paul miraba a sus pacientes súper delgadas y sabía que se habían aplicado Ozempic. La aparición de envejecimiento facial y flacidez son una consecuencia de la pérdida de peso con el medicamento.

En la pieza se encuentra el testimonio de Jennifer Berger, una mujer que subió 22 kilos en un embarazo de alto riesgo y batalló por perder los últimos 10. Ella estaba muy contenta con su cuerpo hasta que dijo: “Recuerdo que me miraba en el espejo, y casi no me reconocía”.

Otro cirujano plástico de Nueva York ha declarado una condena sobre la famosa “cara Ozempic”: “La pérdida de peso puede hacer retroceder tu edad biológica, pero tiende a adelantar tu reloj facial”.

La “cara Ozempic” tiene dos caras de la moneda, aunque el cambio sea drástico y no sea amable ante el espejo para algunas, hay usuarias de Ozempic que se muestran orgullosas de los cambios sobre su rostro.

El término “Ozempic face” se popularizó al punto que aparecen 11 millones de resultados con sólo teclear la frase en Google. La mayoría de ellos son contenidos asociados a cómo evitar que el medicamento afecte el rostro o cómo combatir el envejecimiento asociado a la pérdida extrema de peso.  

NBC News contó la experiencia de Remi Bader con Ozempic. La modelo comenzó con el tratamiento en 2020, como prediabética, resistente a la insulina y con aumento de peso. Aunque con su experiencia con el medicamento perdió peso, al dejarlo, volvieron los atracones y recuperó el doble de peso.

Otra historia de desabasto, pero por razones distintas

El 23 de agosto de 2022, la FDA registró desabasto de Ozempic en Estados Unidos. La razón: “Aumento de la demanda”. La escasez también se vivió en México. Guadalupe lo registró en diciembre de 2022.

El laboratorio Novo Nordisk tiene conocimiento que en países como Estados Unidos, Australia y España Ozempic se está usando para la pérdida de peso, incluso reconocen que en redes sociales existen campañas donde los usuarios se retan a la pérdida de peso usando el medicamento sin que intervenga una recomendación de especialistas de la salud.

En una entrevista vía correo electrónico para La-Lista, Novo Nordisk respondió: “Ozempic no está aprobado para la pérdida de peso, solamente lo está para el control de la diabetes tipo 2 en pacientes adultos, administrado solo o con otros fármacos para la diabetes, de acuerdo con las determinaciones del médico tratante, junto con un régimen de dieta y ejercicio”.

Josafat Camacho Arellano, endocrinólogo, diabetólogo, educador en diabetes y presidente médico de la Federación Mexicana de Diabetes, habló con La-Lista sobre el medicamento. El médico confirmó que Ozempic es un tratamiento de última generación y es excelente, pero debe estar indicado en personas que viven con diabetes tipo 2.

“Deben ser medicamentos prescritos por un médico, para que él tenga la oportunidad de informarle a la persona que lo va a tomar los posibles riesgos, entonces es muy importante lo de los efectos secundarios”, agregó.

Los riesgos de los efectos secundarios y adversos son para todos. “El riesgo es el mismo tengas o no tengas diabetes”, dice el profesional de la salud e indica que para tener “una buena respuesta en la pérdida de peso pueden pasar hasta un año cuatro meses y el médico debe tener a estar al pendiente de la posibilidad o la sospecha de que se puedan presentar (efectos adversos). No es de inmediato, por lo regular después de cuatro meses, seis meses o un año es cuando en su momento pudieran aparecer (los efectos adversos), al principio no”.

Camacho Arellano pone un ejemplo: “Lo voy a prescribir a una persona que tiene diabetes, le exploro el cuello. Lo reviso, no encuentro nada. A los seis meses, lo vuelvo a explorar y resulta que ya encontré una bolita que no tenía al inicio, entonces eso ya es una sospecha”. Es responsabilidad de los médicos que prescriben dar seguimiento a los efectos adversos cuando se recetan medicamentos como el Ozempic. Los que se administran el medicamento sin indicación médica, ¿lo habrán considerado?

El portal National Library of Medicine indica que, por lo menos, en lo que se refiere a la semaglutida y el cáncer de tiroides, las autoridades reguladoras han solicitado actividades de farmacovigilancia y el monitoreo sistemático sobre la presencia de carcinoma medular de tiroides durante al menos 15 años. Los resultados se esperan para el 2035-2037.

Consciente del tema, Camacho Arellano refiere que todavía son productos que requieren una gran investigación. “Es un riesgo. Yo no lo recomendaría precisamente para utilizarlo como en un reto”, dice.

“La responsabilidad de prescribirlo es del médico –acentúa–. Es importante que le digan (a los pacientes) los posibles riesgos. Hoy día la prescripción de cualquier producto debe ser consensuado y con autorización”.

A Guadalupe le escriben por TikTok para preguntar cuánto ha bajado de peso y el tiempo que le ha tomado. Le cuestionan también dónde ha conseguido el medicamento. Las conversaciones sobre Ozempic inician por querer conocer la experiencia. A ella le han comentado sobre los malestares que han sentido con el medicamento e incluso le han compartido de alteraciones en la menstruación.

Guadalupe siempre hace énfasis que está bajo supervisión médica y recomienda hacerlo así, sin embargo, una de las preguntas recurrentes en TikTok es si se puede conseguir el medicamento sin receta. Sin atención médica y persiguiendo los efectos adversos.

Novo Nordisk indica que el desabasto será una situación que se presente durante todo 2023 y alertó, a través de su página de internet, que en el mes de febrero detectó portales que simulaban ser sitios oficiales del laboratorio para la venta directa de su producto por WhatsApp. El laboratorio reportó “numerosos reportes de pacientes que alegan haber sido estafados por estos sitios”.

La-Lista preguntó al laboratorio si su alerta estaba relacionada con la compra de Ozempic y aunque confirmaron que no, también dijeron que sólo las autoridades competentes determinarían si esta es una práctica de mercado negro.

Al cierre de esta edición, las autoridades de Cofepris no respondieron a la solicitud de información que realizó La-Lista.