¿Quieres vivir 20 años más? Adopta estos ocho cambios en tu estilo de vida

Adoptar ocho cambios en el estilo de vida, como comer bien y dormir bien, podría añadir más de 20 años a la esperanza de vida, sugiere un estudio.

El estudio reveló que las personas tenían más probabilidades de vivir más tiempo si realizaban pequeños cambios, incluso aunque retrasaran la adopción de estos hábitos saludables hasta la mediana edad.

“Los resultados de nuestra investigación sugieren que la adopción de un estilo de vida saludable es importante tanto para la salud pública como para el bienestar personal”, comentó Xuan-Mai T. Nguyen, especialista en ciencias de la salud que participó en el estudio en el Departamento de Asuntos para Veteranos de Estados Unidos.

“Cuanto antes mejor, pero aunque solo se haga un pequeño cambio a los 40, 50 o 60 años, sigue siendo beneficioso”, añadió.

La investigación, presentada en la reunión anual de la Sociedad Americana de Nutrición en Boston, se basó en datos de cuestionarios y expedientes médicos recopilados entre 2011 y 2019. Los expedientes abarcaron más de 700 mil veteranos estadounidenses de entre 40 y 99 años que estaban inscritos en el Programa del Millón de Veteranos del Departamento de Asuntos para Veteranos.

Nguyen y sus colegas analizaron los datos para identificar qué factores del estilo de vida estaban asociados a una mayor esperanza de vida. Los expedientes médicos recopilados para el proyecto mostraron que 33 mil 375 participantes fallecieron durante el periodo de estudio.

El equipo añadió que, combinados, los factores de estilo de vida podrían tener un impacto considerable en la esperanza de vida, aumentando varias décadas la esperanza de vida de una persona.

“Los hombres y las mujeres que adoptaron ocho factores terapéuticos de estilo de vida podían ganar 23.7 o 22.6 años de esperanza de vida, respectivamente, a los 40 años en comparación con aquellos que no adoptaron factores de estilo de vida”, escriben los autores.

La falta de actividad física, el consumo de opioides y el tabaquismo fueron los factores que más se asociaron a una muerte prematura: los participantes que presentaban estos factores de estilo de vida tenían entre un 30% y un 45% más de riesgo de morir durante el periodo analizado, descubrieron los investigadores. En cambio, el estrés, el consumo excesivo de alcohol, una mala higiene del sueño y una dieta inadecuada estaban asociados a un riesgo de muerte aproximadamente un 20% mayor durante el periodo analizado.

No obstante, el carácter observacional de la investigación significa que el trabajo no puede demostrar que exista una relación causal entre los factores identificados y las diferencias en la esperanza de vida.

El profesor Naveed Sattar, experto en salud cardiovascular y metabólica de la Universidad de Glasgow, que no participó en el estudio, advirtió que la investigación no incluía ningún ensayo, por lo que diversos factores podrían empañar los resultados.

No obstante, Sattar acogió con satisfacción la investigación. Sattar comentó: “Estos datos se suman a la idea de que la forma en que vivimos nuestra vida importa tanto o incluso más que los medicamentos que recibimos para prevenir o tratar numerosas enfermedades crónicas. Esto significa que no podemos simplemente medicarnos para tener una buena salud y que el estilo de vida siempre importa. Por lo tanto, si el Servicio Nacional de Salud puede ayudar a las personas a desarrollar mejores hábitos de vida, esto podría reducir los costos de las enfermedades crónicas y ayudar a las personas a vivir vidas más agradables y productivas”.

Los ocho cambios en el estilo de vida que podrían prolongar tu vida

• Comer bien.
• Evitar fumar.
• Dormir bien.
• Mantenerse físicamente activo.
• Controlar el estrés.
• Evitar el consumo excesivo de alcohol.
• No tener adicción a los opioides.
• Tener relaciones sociales positivas.