Kate Garret (Julianne Moore) es una mujer madura que está pasando por una fuerte depresión tras la muerte de su esposa, ella sola se hace cargo de una granja y de los caballos con los que da clases de equitación que continuamente cancela por falta de motivación, el escuchar viejos mensajes de voz de su compañera no le ayudan, al contrario, cada que lo hace termina llorando. La única que sabe por lo que está pasando es su amiga Jessie (Fiona Shaw), quien la escucha cada vez que ella necesita desahogarse. Por otro lado, está su hija Claire (Sydney Sweeney) una joven adicta a las drogas que tiene su vida hecha un desastre, ella desaparece cada vez que le vienen en gana y cuando aparece lo hace en un estado realmente deplorable, tanto físicamente como psicológicamente. Todo transcurre en aparente calma hasta que una noche Claire llega a la granja cubierta de sangre y confesando que tras una discusión mató a su novio, dejando la pregunta en el aire: ¿hasta dónde es capaz de llegar el amor de una madre por salvar a su hija?
Apple TV+ estrenó recientemente Echo Valley, un thriller psicológico con una carga importante de drama. La película dirigida por Michael Pearce y escrita por Brad Ingelsby y Michael A. Pruss, nos cuenta una historia que se sostiene gracias a las soberbias actuaciones de sus protagonistas, los giros argumentales que nos presenta pueden llegar a ser hasta cierto punto ridículos y apresurados, sobre todo en la parte final, pero al contrario de lo que se podría pensar la cinta funciona y cuando menos te das cuenta logra atraparte, la atmósfera de tristeza que manejan los personajes y los matices que alcanzan hace que el espectador difícilmente abandone la película.
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Moore interpreta magistralmente a una madre atormentada, incapaz de salvar a su hija de ella misma, al tiempo que llora desconsoladamente por la muerte de su esposa, la profundidad que le da a Kate, al mismo tiempo indefensa y fuerte, es algo común en sus actuaciones, pero hay algo en Echo Valley que supera sus trabajos recientes. Sweeney por su parte, en un papel más corto de lo que se esperaba, se aleja del glamur de sus personajes habituales, distanciándose por completo del símbolo sexual con el que comúnmente se le relaciona, ofreciéndonos una Claire cruda y explosiva, además de lograr causar con su interpretación una opresión en el pecho para cualquiera que haya tenido que lidiar con un ser querido con problemas de adicciones.
El peso emocional que tiene el guion convive a la perfección con los elementos de suspenso, la gran cinematografía de Benjamin Kracun genera un ambiente sutilmente opresivo que resulta perfecto para esta historia. Los temas de los que se habla se llegan a tocar con profundidad, la moralidad, la adicción y el autosacrificio del amor maternal se abordan con inteligencia. En resumen, sin ser un thriller disruptivo, logra sobresalir gracias a sus interpretaciones.
Echo Valley está disponible en Apple TV+.