Hay que “yucatanizar” México para pacificarlo: Alberto Capella 

Yucatán es la entidad con menor índice delictivo del país, lo que para expertos en seguridad pública debería ser un ejemplo a seguir en el resto de los estados de la República; de acuerdo con la estadística del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública tan solo en 2022 se cometieron 4 mil 209 delitos, es decir el 0.2% de los que ocurren a nivel nacional.

La tendencia a la baja en delitos comenzó en 2007, cuando la gobernadora Ivonne Ortega Pacheco nombró como secretario de Seguridad para el periodo 2007 – 2012 al piloto Luis Felipe Saidén Ojeda, quien fue ratificado por dos administraciones más, de diferentes partidos políticos. 

En 2012 – 2018 lo ratificó el priísta Rolando Zapata Bello y el 28 de septiembre de 2018 una vez más por el panista Mauricio Vila Dosal​ para el período 2018-2024. De acuerdo con Jesús Alberto Capella Ibarra, ex secretario de seguridad en Tijuana, Morelos y Quintana Roo; y socio fundador de AC consultores, esta continuidad ha permitido la pacificación de Yucatán. 

En 2007 se tenía una taza de 4 mil 284 delitos por cada 100 mil habitantes en Yucatán, uno de los picos más violentos en su historia reciente. Para cuando concluyó el primer periodo de Saidén Ojeda como secretario de seguridad en 2013, la incidencia se redujo casi un 50% y para 2022 la reducción era de 94% en comparación con 2007. 

En entrevista para La-Lista, Capella Ibarra señaló dentro de los 32 estados, solo tres no se encuentran en alerta máxima por la presencia del crimen organizado y con índices delictivos por debajo de la media nacional, entre ellos están Yucatán, Tlaxcala y Campeche, aunque este último ha tenido un incremento de 2020 a 2022 de un 90% en delitos. 

“Siempre he dicho que habría que analizar lo que ha sucedido en Yucatán, y yucatanizar México; porque finalmente tienen una estrategia avalada por la ciudadanía en las últimas dos décadas, con un titular de Seguridad que ha permitido generar una serie de construcciones en materia institucional para hacerle frente a la violencia”, expuso.

Parte de lo que ha hecho Saidén Ojeda es, entre otras cosas, el fortalecimiento de las policías, desarrollar una estrategia institucionalizada y apartidista, prevención y sofisticación de los agentes y las prácticas, características que en el resto del país no se tienen, aseguró Alberto Capella.

“En Yucatán particularmente se ha logrado avanzar en ese proceso y quitar la contaminación de carácter político-partidista al tema, entonces el secretario Saidén Ojeda, igual trabajó con el PRI, con el PAN, por lo que se ha mantenido el tema de inseguridad en esa zona, alejado”, subrayó.

No politizar el tema de seguridad pública, dijo, es uno de los aspectos fundamentales para un combate certero al crimen; lamentó que el tema se tenga cooptado por parte de la política partidista, ya que esta afecta el desarrollo de buenas practicas policiales y de seguridad.

“Pareciera que los partidos de oposición le apuestan a que el gobierno en turno fracase en el tema de seguridad para tener mayores posibilidades electorales en la siguiente contienda. Es perverso y lamentable. Para avanzar tenemos que analizar esto que sucede en Yucatán, quitarle esa contaminación político-partidista y generar proyectos que pudieran desarrollarse en los siguientes 15 años”, comentó.

De acuerdo con el análisis realizado por el exfuncionario, para combatir la criminalidad en las diferentes entidades del país se debe construir una estrategia a mediano y largo plazo que supere periodos sexenales, tanto gubernamentales, municipales y presidenciales, con un consejo de expertos que le den continuidad. 

“Fue un error estratégico de los últimos tres presidentes auto endosarse el fenómeno del homicidio en México, cuando hay 32 responsables igual que ellos en este delito, (…) se han lavado las manos muchos de ellos y esto lejos de ayudar a solucionar el problema y las decisiones centralistas tampoco han beneficiado a muchos lugares”, dijo.

Agregó que con la desaparición de la Policía Federal y las expectativas de la creación e la Guardia Nacional, lejos de ayudar al desarrollo y construcción institucional, ha provocado lo contrario. 

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Con respecto al informe sobre seguridad hecho por AC Consultores en el que destacan el aumento de entidades en estado de alerta máxima por la presencia de grupos del crimen organizado, señaló que el país ha sufrido los mayores costos a nivel mundial.

Comentó que algunos sitios como Guanajuato, además del tema del narcotráfico y del consumo local de drogas, hay un grave conflicto de huachicol, lo que ha provocado una lucha encarnizada entre grupos criminales, que usualmente se dedicaban al tema del tráfico de drogas.

Otro caso es Colima, donde destaca que el puerto es sumamente lucrativo para el transporte de mercancía, “probablemente por ahí se importan precursores para generar drogas sintéticas, particularmente el fentanilo”, por lo que la lucha por el control de ese puerto por grupos criminales provoca altos niveles de violencia.

“Aguascalientes y Querétaro habían logrado mantenerse al margen de problemas de delincuencia importante, pero ya prácticamente están rodeados por entidades con graves complejidades y también ya tiene una afectación importante”, lamentó. 

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