Querido 2120
La historia nos dice que cada cien años atravesamos por una pandemia que viene a cambiarlo todo, así ha sido en los últimos trescientos años y quizá nuestra experiencia pueda ahorrarles unos cuantos dolores de cabeza.
La historia nos dice que cada cien años atravesamos por una pandemia que viene a cambiarlo todo, así ha sido en los últimos trescientos años y quizá nuestra experiencia pueda ahorrarles unos cuantos dolores de cabeza.
Queridos humanos del 2120, escribo esto con una gran esperanza, de entrada de que sigan aquí. La historia nos dice que cada cien años atravesamos por una pandemia que viene a cambiarlo todo, así ha sido en los últimos trescientos años y quizá nuestra experiencia pueda ahorrarles unos cuantos dolores de cabeza.
Aquí algunos consejos:
- Usen cubre bocas.
En lo que averiguan la forma de transmisión de su nuevo virus, usen cubre bocas. Nosotros tendríamos que haberlo adivinado desde que vimos que las fotos de quienes pasaron por la Gripa Española. Pero pareciera que las lecciones más básicas son las primeras que se olvidan.
- Exijan a sus líderes hablar con la verdad.
Esto también lo sabíamos y no todos lo hicieron. En los ensayos en los que se preparaban para lo próxima gran pandemia, sabían ya que los países que peor la pasarían serían aquellos que guardaran información, y no fueran claros con su población.
A pesar de eso, en el 2020 encontramos líderes de todas las regiones que decidieron no hablar con seriedad, no hablar con la verdad y no transmitir a su población lo grave de la pandemia, esos países, son los que tuvieron los peores resultados. - Lo que le pasa a uno, les pasa a todos.
Esto es más que evidente cuando hablamos de un mundo globalizado y la transmisión de un virus, pero tenemos que ir más allá en nuestras soluciones a los grandes problemas de salud y nuestra preocupación por lo que sucede en cualquier rincón del mundo. Si después de tantas veces no hemos aprendido la lección de que todas las personas importan, quizá, no hemos aprendido nada.
- Hemos aprendido que basta una semana sin humanos en las calles para ver a la naturaleza recuperar sus espacios.
Dudo mucho que la lección del 2020 haya sido suficiente, hagan lo que puedan por darle ese respiro, si es que aun existe.
- Abrácense.
Si la próxima gran pandemia aun no llega, desde este rincón de la historia podemos decirles que no importa cuán avanzada creamos que es nuestra tecnología o cuánta confianza tengamos en la ciencia, el mundo entero puede cambiar de un día para otro. En semanas un ente microscópico nos llevó a cerrar fronteras y escuelas, perder trabajos y perder seres queridos. No ponemos cambiar el pasado, pero sí aprender de él.
Nosotros no lo hicimos, ojalá lo hagan ustedes.
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