Sin conectividad nada funciona
En contraste

Es senadora de la República, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos y vicecoordinadora del Grupo Parlamentario de Acción Nacional; es la primera mujer que ocupa ese cargo.

X: @kenialopezr

Sin conectividad nada funciona
Foto: Alexa Herrera / La-Lista

Como lo hice público en mis redes sociales, el domingo pasado acudí al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) y sostuve un diálogo con personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) durante cinco horas. Empezamos a las 12:00 horas y culminamos a las 17:00 horas. Por instrucciones del general secretario de la Defensa, Luis Cresencio Sandoval, fuimos recibidos por los generales René Trujillo Miranda, Gustavo Vallejo Suárez, José Luis Chiñas Silva e Isidro Pastor Román.

El recorrido inició con una reunión en la que expusieron el proyecto maestro del aeropuerto Felipe Ángeles. Según lo explicado por los miembros de la Sedena, el costo de obra ejercido por su construcción asciende a 74 mil 500 millones de pesos. Y faltan por ejercer alrededor de 4 mil millones de pesos.

Entre lo que se gastó en el avance de construcción de Texcoco, en su cancelación y lo que se ha gastado en la construcción del AIFA llevamos más de 400 mil millones de pesos y, al paso que vamos, seguirá siendo un gasto porque la deuda continúa.

Cabe recordar que aún están pendientes de pagar 90 mil 630 millones de pesos por lo bonos colocados para construir Texcoco, mismos que deben pagarse en los próximos 20 años. Sin duda, es un tema que la Secretaría de Hacienda debe resolver con urgencia, porque de lo contrario seguirán tirando el dinero de los mexicanos.

Las deficiencias de este aeropuerto no están en la construcción que corrió a cargo de la Sedena. El problema claramente está en la falta de planeación, de conectividad, de pasajeros y de aerolíneas que quieran realizar vuelos desde ahí. El problema de este elefante blanco es la ineficiencia del gobierno.

En cuanto al tema financiero, de seguir con 12 operaciones –seis vuelos de salida y seis de regreso–, la operatividad del aeropuerto no alcanzará su punto de equilibrio, el cual, según lo informado, alcanzará cuando se tengan 5 millones de usuarios, lo que en el corto plazo no se ve posible.

Las obras de conectividad dependen de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), las cuales siguen pendientes de terminar. Por ejemplo, la conexión del Tren Suburbano de Buenavista será de 23 kilómetros, ocho de los cuales ya están realizados y corrieron a cargo de la Sedena, los restantes 15 siguen pendientes porque la SCT no los ha terminado. Igual pasa en las demás obras viales.

No te pierdas:Las trampas de Morena

También nos trasladamos a la Torre de Control, donde los controladores de vuelo de los Servicios de Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano (Seneam) me explicaron el equipamiento con el que cuentan. Qué bueno que tienen el mejor equipo de México, pero sin tráfico aéreo de poco sirve.

Debido a que recibí solicitudes de preguntas por redes sociales y por expertos, entregué ayer a los encargados del AIFA 20 preguntas puntuales, las cuales esperamos que contesten a la brevedad para estar en posibilidades de informar al pueblo de México sobre esta obra.

Hoy tenemos un aeropuerto con mala conectividad, donde la gente está preocupada porque no hay vialidades ni medios de transporte eficientes para llegar, hay pocos vuelos y, en consecuencia, pocos locales comerciales ocupados. El costo de la obra se sigue incrementando, la deuda por Texcoco no se ha saldado y mientras no sea un proyecto sustentable, el AIFA solo será un elefante blanco y una carga para los mexicanos.

Síguenos en

Google News
Flipboard