El odio a Tenoch Huerta es todo lo que está mal con nuestro país
HÍBRIDO

Como crítico de cine y música tiene más de 30 años en medios. Ha colaborado en Cine Premiere, Rolling Stone, Rock 101, Chilango, Time Out, Quién, Dónde Ir, El Heraldo de México, Reforma y Televisa. Titular del programa Lo Más por Imagen Radio. X: @carloscelis_

El odio a Tenoch Huerta es todo lo que está mal con nuestro país
Foto: Película "Black Panther: Wakanda Forever" / Marvel Studios

Era de esperarse que el éxito de un mexicano como Tenoch Huerta, que es una figura muy polémica en nuestro país, desataría en su contra ese clasismo y racismo del que tanto teclea en sus redes sociales, y que sus antagonistas se encargarían de darle la razón sin que él tuviera que mover un dedo. No usaré palabras al azar: “un mexicano como Tenoch”, es decir, un mexicano moreno que no se conforma con el estado de las cosas y que es muy vocal al respecto.

¿Por qué es importante remarcar esta diferencia? Porque no faltará quien diga que algo similar sucedió con Eugenio Derbez cuando la película Coda ganó el Oscar o con Salma Hayek cuando estelarizó Eternals. No faltará quien recurra a ese argumento facilón de que los mexicanos “somos como los cangrejos” y que nos alegramos con el fracaso de los demás. No, Tenoch Huerta no es como Salma ni como Derbez, es un personaje mucho más controvertido y era claro que sus triunfos no le iban a caer bien a muchas personas.

Para muestra está esa campaña que duró meses en Twitter para desprestigiarlo, “acusándolo” con Marvel y pidiéndole a esta empresa de entretenimiento que lo eliminara de Black Panther: Wakanda Forever antes de que se hiciera oficial el anuncio, hace apenas unos días durante el evento de la Comic-Con, de que efectivamente Tenoch ya forma parte de la familia del MCU, el Universo Cinematográfico de Marvel, ese proyecto al que tantos actores en todo el mundo, principiantes y consagrados, aspiran a pertenecer hoy en día (que estas aspiraciones sean o no encomiables ya es otro tema).

Y pues no, no se les hizo a sus detractores. Tenoch brilló en la conferencia para dar este anuncio con una sonrisa que deslumbró en todas las redes, en todos los medios, por todo el mundo. Y lo hizo con un agradecimiento, primero en perfecto inglés, y después en un emotivo español. Pero no solo eso, se anunció que la actriz Mabel Cadena, junto a Josué Maychi y María Mercedes Coroy (dos histriones de ascendencia maya, ella de Guatemala) también formarán parte de esta familia de superhéroes. El único “problema” es que esta historia de éxito no funciona para la narrativa de odio y división que ciertos grupos quieren empujar en nuestro país.

Entonces, como mexicanos, se supone que deberíamos alegrarnos por todos ellos, ¿cierto? Aparentemente no es así, porque la narrativa que proponen algunos líderes de opinión –y sus seguidores en redes sociales– es la de aislar a Tenoch de este grupo e incluso arrebatarle sus propios logros para dedicarnos a celebrar únicamente a los otros actores. Así nada más, como si México se hubiera quedado atorado en la mentalidad de la secundaria donde el castigo es aplicarle la ley del hielo a un compañero del salón solo porque no le cae bien a los chicos populares.

Que si Tenoch ha dicho, que si Tenoch ha hecho. Por supuesto, pero como lo dije desde el inicio Tenoch es una figura polémica, como tantas otras en México, que no está exenta de sus propios errores, que seguramente está consciente de estos y que ya tendrá tiempo suficiente para reflexionar si así lo cree pertinente. Pero en este momento nadie puede arrebatarle el reconocimiento que ha logrado. ¿Tenemos todos que estar de acuerdo y aplaudirle? Tal vez no, pero tampoco hay que humillarse tratando de tapar el sol con un dedo cuando Tenoch brilla.

Hace varios años, en 2002, cuando trabajé para Editorial Televisa, me asignaron la tarea de revisar los archivos fotográficos de la revista TVyNovelas para la realización de un especial por los primeros 20 años de la entrega de premios de esta publicación. Tener acceso a esos materiales fue un total agasajo. Mi primer impulso fue buscar las imágenes donde Salma Hayek, Gael García, Diego Luna y otras celebridades que hoy nos representan en Hollywood, aparecían recibiendo sus premios.

Pero cuando le enseñé esa primera selección de fotos al todavía director editorial, Don Chucho Gallegos, su respuesta literal fue “Salma y Gael no venden”. Y ahora lo parafraseo, porque me dio a entender que estos actores no le simpatizaban al público mexicano, o al menos no al público de TVyNovelas. Para mí fue una sorpresa pues en aquel entonces pensaba, con la misma ingenuidad de aquellos que les gusta compararse con “cangrejos”, que todos los mexicanos nos alegramos por el triunfo de nuestros paisanos. No es así.

Tenoch no es como Salma. Tenoch no es como Eugenio. Tenoch no es como Gael. Aunque tiene una trayectoria de más de 15 años en la actuación, Tenoch Huerta no proyecta esa imagen de privilegio que ellos tienen y, de hecho, es constantemente recriminado por no ser más estelarAhora que ya lo es, el que Tenoch logre “vender” o simpatizarle al grueso del público mexicano (e internacional) es algo que ya veremos cuando estrene Wakanda Forever y lo que venga después. Pero reflexionando sobre lo que el señor Gallegos me dijo aquella vez, hoy pienso que la principal razón por la que cierto sector del público mexicano no siente el impulso de celebrar cada triunfo de Salma, Eugenio o Gael es porque se trata de otro más en una larga lista de privilegios.

El caso de Tenoch, Mabel y Josué es diferente y merece que se le distinga así, como el triunfo de mexicanos jóvenes y trabajadores que pueden percibirse como cualquiera de nosotros. Negar esto es un despropósito. Y, por cierto, corríjanme si me equivoco, pero antes de la publicación de esta columna yo no vi que Salma, Gael, Diego, Eugenio, Guillermo, Alfonso, Alejandro o alguno de estos famosos que ya triunfan en Hollywood, les dedicaran unas palabras o le extendieran una felicitación a estos compatriotas como las que ellos reciben religiosamente.

BREVES

Ya se anunció el estreno de la segunda temporada de la serie Reservation Dogs para este 3 de agosto en Estados Unidos. Mientras tanto, en México podemos ver a través de Star Plus la primera temporada de esta historia coescrita por Taika Waititi, ganadora del Spirit Award a la mejor nueva serie y que ha recibido elogios de gente como Guillermo del Toro.

En Netflix se estrena la serie Uncoupled (Desparejado), una comedia del creador de Sex and the City y estelarizada por Neil Patrick Harris, que ahora se centra en la vida de un hombre gay cuarentón en la ciudad de Nueva York.
Llega a las salas de cine Buena suerte, Leo Grande, una película sencilla pero efectiva sobre el despertar sexual de una mujer madura, con una destacada actuación de la actriz Emma Thompson.

Síguenos en

Google News
Flipboard
La-Lista Síguenos en nuestras redes sociales