Coexistencia del desarrollo tecnológico y la defensa de la democracia
In-grid Telecom

Doctora en Comunicación y Pensamiento Estratégico. Dirige su empresa BrainGame Central. Consultoría en comunicación y mercadotecnia digital, especializada en tecnología y telecomunicaciones. Miembro del International Women’s Forum.

TikTok: @_imotta

Coexistencia del desarrollo tecnológico y la defensa de la democracia
La dualidad del uso tecnológico en la defensa de la democracia llega cuando, paradójicamente, se convierte en herramienta de opresión y manipulación de la información, con el objetivo de socavar nuestros derechos fundamentales. Foto: Envato Elements

Finalmente votamos, después de meses de ser bombardeados de promesas, verdades y falsedades, ejercimos nuestro derecho a elegir a la persona que consideramos mejor para dirigir nuestro país, y aprendimos más sobre nuestra democracia, cómo defenderla y lo mucho que nos falta para ejercerla plenamente.

En este proceso, la tecnología continuó democratizando el acceso a la información no solamente para saber lo que estaba pasando en nuestro país, sino también para dejarnos saber la opinión de especialistas, expertos en temas electorales de México y otros países que analizaron la situación electoral empoderando a líderes de opinión locales y extranjeros, dándoles una voz que repercutió en la formación de opinión de millones de votantes que gracias a la información lograron crear comunidades para defender sus ideas y derechos civiles.

Si bien las redes sociales y las plataformas digitales han democratizado la información para invitar a la población al debate y la movilización, acercar a los candidatos a los electores, aún no logran en México dar cuenta de una votación electrónica que de mayor accesibilidad al proceso electoral que de manera digital permita el conteo de votos en tiempo real; candados en blockchain imposibilitarían el fraude electoral haciendo de las famosas “caídas del sistema” una comedia confirmada.

La dualidad del uso tecnológico en la defensa de la democracia llega cuando paradójicamente se convierte en una herramienta de opresión y manipulación de la información con el objetivo de socavar nuestros derechos y libertades fundamentales como la vida, la seguridad personal, la libertad de pensamiento y expresión, la igualdad ante la ley, y la privacidad, entre otros privilegios de los que México ha adolecido por muchos años, en detrimento de la dignidad de sus habitantes. Ojalá sea una práctica que termine de manera definitiva en este nuevo sexenio, nos urge.

La defensa de la democracia está, al igual que la tecnología, en manos de todos. Encontrar el equilibrio entre la tolerancia y la regulación merece la participación de una sociedad civil que reclame transparencia y rendición de cuentas por parte del gobierno entrante, sin ser nunca acallado por la violación a la privacidad y la protección de sus datos personales para lograr un equilibrio responsable de vigilancia activa para la construcción del futuro de una sociedad mexicana bien informada, educada y desarrollada tecnológicamente.

La administración entrante debe ofrecernos el equilibrio de la innovación y el desarrollo tecnológico para la defensa de la democracia mientras protege los derechos de los ciudadanos con leyes robustas para la protección de nuestros datos y privacidad. La tecnología por su lado jugará un papel importantísimo en la construcción de mensajes y como un catalizador de la democracia, mostrando la profunda relación que existe entre el desarrollo tecnológico y la defensa de la libertad en un mundo cada vez más interconectado y digitalizado.

Hoy sabemos con claridad la relación innegable de la tecnología y los procesos democráticos, también confirmamos que su relación plantea desafíos que se deben abordar con determinación en temas políticos. Los avances tecnológicos deben ser regulados cuidadosamente para protegernos mientras que los ciudadanos tenemos la responsabilidad de estar vigilantes y activos para la defensa del dialogo social, reforzando la inclusión, la equidad y la justicia de nuestro sistema democrático.

Síguenos en

Google News
Flipboard