El poder de la música
Estos son tres ejemplos de profesionales de la música que comenzaron su formación en escuelas públicas y lograron abrirse camino con el tesón de practicar y practicar.
Estos son tres ejemplos de profesionales de la música que comenzaron su formación en escuelas públicas y lograron abrirse camino con el tesón de practicar y practicar.
“El rock es una piscina, el jazz es todo un océano”.Carlos Santana
Más allá de cuotas, la música latinoamericana ha conquistado los diversos mercados. Basta echar ojo a las programación de escenarios de Estados Unidos, Europa y Asia con conciertos de músicos como el trompetista Pacho Flores, el baterista Antonio Sánchez o el pianista Héctor Infanzón. Personajes que se han forjado camino a base de perfeccionamiento de técnica, disciplina y pasión por ese don de comunicar con cada nota emanada de sus instrumentos.
En el caso de Hector Infanzón, pianista mexicano que el 3 de septiembre celebrará en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris 45 años de trayectoria, una vida entregado a esas sonoridades que desde su primera infancia escuchó en el Centro Histórico de la Ciudad de México, enriqueció durante sus épocas de escuela, agregó las influencias de la época y sus propias exploraciones, caldo de cultivo que suele llamar “sonografías”, estampas que podemos visualizar al escuchar algunas de sus 13 producciones discográficas, de las cuales destacó Tres historias concertantes, disco nominado a dos Latin Grammy 2021 en las categorías de Mejor álbum de música clásica y Mejor obra/Composición Clásica Contemporánea.
Ya que hago referencia al Grammy, traigo a colación al baterista Antonio Sánchez, quien ha ganado cuatro premios Grammy y se ha consolidado como un referente que comenzó a tocar desde niño, cuando vivía en el pueblo de Tlalpan, sus años en la Escuela Superior de Música del Instituto Nacional de Bellas Artes, la beca para la licenciatura en ejecución de jazz en Berklee College of Music de Boston y de ahí su participación con grandes músicos como Gary Burton, Paquito D´Rivera, Chick Corea, Toots Thielmans y durante dos décadas como baterista de la banda Pat Metheny Group. Una carrera cargada de sacrificios y logros, frustraciones y satisfacciones.
En los último dos años, el músico encargado de la banda sonora de la película Birdman de Alejandro González Iñárritu realiza la Residencia Antonio Sánchez, evento que se lleva a cabo en el Centro Nacional de las Artes. Este año participaron 94 músicos de distintas partes de la República mexicana, quienes recibieron asesorías, clases y hasta tocaron con instituciones como el propio Antonio, Miguel Zenón, Thana Alexa y otros más. Mención aparte merece su álbum Shift, Bad hombre Vol. 2, producción que saldrá a la venta el 26 de agosto e incluye temas de Silvana Estrada, Lila Downs, Trent Reznor, Rodrigo y Gabriela, y como maestro de ceremonias del mismo, el primer actor Ignacio López Tarso, abuelo de Antonio Sánchez.
Cierro la triada con el trompetista venezolano Pacho Flores, quien recién presentó su disco Estirpe, álbum publicado por la Deutsche Grammophon que cuenta con composiciones del mexicano Arturo Márquez, el cubano Paquito D´Rivera, el argentino Daniel Freiberg y el uruguayo Efrain Oscher. Un concierto en sí mismo ejecutado por la Orquesta Sinfónica de Minería bajo la batuta del mexicano Carlos Miguel Prieto.
Estirpe contó con el registro audiovisual de los documentalistas, también mexicanos Bernardo Arcos y Hugo López Arce, quienes cuentan que la energía que fluyo durante las grabaciones no tiene comparación y marcan un referente, tal fue el nivel de perfeccionamiento, que me confió Bernardo, un viernes a las 6 de la mañana, Pacho Flores le marcó desde Florencia y le dijo: estoy frente El David de Miguel Ángel y he caído en cuenta que desafiné en una de las tomas, podrías checarlo por favor, ¡estaba de vacaciones!, exclamó Bernardo Arcos. Pacho Flores formó parte del Sistema de Orquestas Juveniles e Infantiles de Venezuela y ganó entre otros premios, como el del Concurso Internacional Maurice André y ha figurado como solista de Orquestas de París, Japón, España, Nueva York, Ucrania, Rusia y América Latina.
Tres ejemplos de profesionales de la música que comenzaron su formación en escuelas públicas y lograron abrirse camino con el tesón de practicar y practicar hasta que eso que se escucha suene igual que como lo imaginaron en su cabeza.