De Skins a Sex Education: Siete de los mejores dramas escolares de la tv

Quince años después de que Grange Hill fuera cancelada, la cadena BBC vuelve a los dramas escolares para el público adolescente con una nueva serie tipo “Grange Hill se mezcla con The Breakfast Club”, llamada Phoenix Rise. A continuación, repasamos algunos de los mejores dramas escolares que la precedieron.

1. Grange Hill

Este programa de la BBC es toda una institución que, a lo largo de sus 31 temporadas, generaciones y generaciones crecieron con sus impactantes historias, que iban desde la adicción a la heroína hasta el abuso sexual. Generó sencillos que alcanzaron el Top 10 (Just Say No!), alcanzó audiencias máximas de 12 millones de jóvenes espectadores y aportó un realismo descarnado a la programación juvenil como nunca antes se había visto.

2. Jóvenes y rebeldes

La historia de Judd Apatow y Paul Feig sobre los marginados de una preparatoria fue tan maravillosamente observada y sutilmente tramada que se convirtió en un clásico de culto, y sirvió de incubadora para la siguiente generación de talentos estadounidenses. Seth Rogen, James Franco, Jason Segel y Busy Philipps se iniciaron en esta serie inteligente, conmovedora y muchas veces divertida.

3. The OC

Esta historia de telenovela de adolescentes adinerados de California fue uno de los mayores fenómenos de la cultura pop de principios de la década de 2000, y con razón. El ingenio mordaz de Seth Cohen hizo que se compraran miles de suéteres estilo preppy, y era casi imposible no adorar el tono hiperactivo y con frecuencia sarcástico con el que esta serie socavaba los dramas sentimentales de sus acaudalados personajes. El hecho de que todo se desarrollara en un paisaje soleado, lleno de gente guapa y casas palaciegas, no estaba de más.

4. Skins

La reputación de sexo, drogas y new rave eclipsó muchas veces el verdadero atractivo de este drama adolescente: su talento para crear personajes completos que viven vidas adolescentes genuinamente creíbles. Un reparto repleto de futuras celebridades, como Nicholas Hoult y Dev Patel, dio auténtico valor a un guion que oscilaba entre la tragedia y la alegría de vivir de la adolescencia, es decir, lo que realmente se siente al ser adolescente.

5. Euphoria

Hay una buena razón por la que no menos de nueve Emmys fueron otorgados a este drama adolescente de la Generación Z, repleto de polémica. En parte, se debe a que el papel de Zendaya como Rue, una adicta a la heroína en recuperación, es una de las interpretaciones televisivas más convincentes de los últimos años. Pero, sobre todo, esta serie de HBO aporta a los dramas escolares algo que durante mucho tiempo ha estado ausente en el género: una visión inquebrantable con todos sus defectos de la vida de los adolescentes que es irresistiblemente observable, independientemente de la edad.

6. Heartstopper

Cuando se trata de dramas escolares discretamente revolucionarios, nada se puede comparar con la historia de Alice Oseman sobre el amor homosexual entre hombres en una preparatoria británica. Es una historia absolutamente encantadora de la sexualidad como un espectro, y una visión tan incomparable sobre la alfabetización emocional de los adolescentes de hoy en día que retumba con una sensación de novedad.

7. Sex Education

Se necesita una serie escolar excepcionalmente buena para atraer a un actor del calibre de Gillian Anderson. Es posible que los espectadores de esta elegante serie sobre un adolescente aspirante a terapeuta sexual la hayan visto por las lascivas travesuras carnales, pero se quedaron por una serie cuyos episodios, impecablemente interpretados, oscilan entre la risa a carcajadas y la emotividad a flor de piel.