Mujeres empoderadas
Política consciente

Licenciada en Relaciones Internacionales. Consultora en imagen pública y estratega en comunicación. Actualmente produce y conduce el programa The White Table para MMoodtv. Cofundadora del colectivo TÚ x México. Twitter: @anapatam_mx

Mujeres empoderadas
Foto: Pexels

Para mí, ser una mujer empoderada tiene que ver con la capacidad de reconocerte capaz, fuerte y lo suficientemente competente para enfrentar y manejar lo que sea que te aviente la vida.

Los momentos de más duda son esos momentos en los que yo me he visto al espejo y he dicho: “Yes, I can!“.

De los momentos más cruciales en mi vida fue cancelar mi boda a los 27 años, después de seis años de noviazgo y renunciar, en ese momento, al ‘siguiente paso’, rompiendo con el molde familiar tradicional en el que fui educada y aceptar que no estaba ahí por las razones correctas.

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Lloré por mucho tiempo, y me sentí culpable por hacer las cosas diferente.

Comencé a cuestionarme…

¿En qué momento se confundió el amor con la culpa?

¿En qué momento se confundió el amor con el apego?

¿En qué momento se confundió el amor con el sacrificio?

¿En qué momento se confundió el amor con esta promesa de “hasta que la muerte nos separe” y se convirtió en una obligación?

¿En qué momento el amor se confundió con la codependencia?

¿En qué momento el amor se confundió con el miedo a la soledad?

¿En qué momento el amor se confundió con el sacrificio?

¿En qué momento el amor se confundió con la supervivencia?

Desde ese entonces me comprometí conmigo misma y me prometí : “Cuando vuelvas a estar ahí, asegúrate de estar por amor y que estés ahí por las razones correctas, ignora el qué dirán”. 

Darte cuenta de que la historia que nos cuentan las películas, y que nos cuenta la sociedad de cómo debe crecer, evolucionar y trascender una mujer simplemente a través del matrimonio y de la familia, es una foto difícil de romper, creo que ese fue mi primer gran trancazo en la vida. 

Sin embargo, hoy tras resignificar lo que pasó en mi vida, estoy convencida de que esto era justamente lo que me tenía que pasar para convertirme en la mujer que soy: independiente, segura, valiente, valiosa, fuerte, imparable y qu,e sin duda, sabe lo que quiere.

La gente que la hace en la vida es la gente que hace que las cosas pasen. 

Hoy busco inspirar, concientizar y generar información que las haga cuestionarse “si lo que piensan que piensan” es lo más provechoso, es lo más eficiente y lo que más les suma a su vida.

Siempre he pensado que de algo carecemos las mujeres mexicanas, y no por motu proprio, sino porque nadie nos contó esta historia, porque no crecimos con este reforzamiento de información y de autoestima, porque nadie nos dijo cuando éramos niñas que el cielo es el límite y que somos capaces de hacer lo que sea. Por eso creo que todos los días las mujeres debemos sentirnos accountable, responsables de nuestra autogestión y de sentirnos capaz y de creérnosla. Este es el primer gran paso que debemos dar todas las mujeres mexicanas.

La mejor decisión no siempre es la más popular, y a veces resulta difícil alcanzar tus sueños. A pesar de la falta de aprobación a tu alrededor, haz un gran esfuerzo por silenciar todas esas voces que no suman, y deja esa sola voz, esa sola persona que cree en ti.

¡Eres más fuerte de lo que tú crees!

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