Cuesta de enero

Empresario, actuario y financiero con más de 23 años de experiencia en la industria aseguradora mexicana y multinacional. Gracias a su expertise participa como especialista en seguros y finanzas personales en medios de alto perfil y es conferencista para empresas y universidades; además de deportista, biker y amante de los aviones. Su reto es crear conciencia sobre salud financiera para que las personas tengan una mejor calidad de vida.

IG: @manu.garciabon X: @manugarciabon

Cuesta de enero
La “cuesta de enero” es como despertar crudo después de una buena fiesta. Foto: Profeco / Gobierno de México

La “cuesta de enero” es como despertar crudo después de una buena fiesta. Nos encontramos buscando monedas en los bolsillos y haciendo magia con las cuentas mientras enfrentamos la resaca económica. Después de derrochar en regalos y festividades, en enero, nuestras billeteras claman por unas merecidas vacaciones. Es como si hubieran agotado todas sus energías durante la temporada festiva y ahora están en modo de pausa financiera.

Mantengámonos tranquilos y evitemos caer en pánico, ya que esto puede llevarnos a tomar decisiones financieras apresuradas. Aquí les presento cinco consejos para enfrentar de manera inteligente las próximas semanas, que también forman parte de cuesta de enero.

Ajustar nuestro presupuesto: Es crucial ajustar el presupuesto de enero según las circunstancias actuales. Recomiendo comenzar identificando las fuentes de ingresos y clasificando los gastos entre esenciales y no esenciales. Priorizar los gastos esenciales establece una base sólida para mantener el equilibrio financiero.

Explorar fuentes de ingresos adicionales: Identificar oportunidades para incrementar los ingresos, ya sea a través de proyectos independientes, venta de artículos o la prestación de servicios extras, puede ayudar a aliviar la presión financiera.

Gestionar las deudas con inteligencia: Es recomendable dar prioridad a las deudas con tasas de interés más elevadas, ya que estas pueden tener un impacto significativo en las finanzas. En caso de dificultades para cumplir con los pagos, sugiero establecer comunicación con los acreedores para explorar opciones de negociación que beneficien a ambas partes.

Planificar para gastos futuros: Anticipar posibles gastos en febrero y marzo facilita la elaboración de un plan financiero a corto plazo, permitiendo un mayor control durante estos meses.

Aprender para el futuro: Reflexionar sobre los hábitos de gasto en diciembre es una gran oportunidad para mejor la planificación financiera durante el resto del año. Estoy seguro de que, al realizar una introspección, podrán evitar cometer los mismos errores y tomar decisiones más acertadas en el futuro.

En resumen, enfrentar la “cuesta de enero” implica hacer ajustes inteligentes en nuestros ingresos y gastos. Los invito a aprovechar lo mejor de esta experiencia y aprender de los errores cometidos para que no vuelvan a repetirse.

No esperen más para organizar sus finanzas personales, este es el momento perfecto del año para empezar a hacerlo.

Síguenos en

Google News
Flipboard