La colaboración de Victoria Beckham con Mango muestra cuánto ha avanzado como diseñadora
Victoria Beckham dijo que quería que la colección de Mango "se dirigiera a un público más amplio" y mantuviera la estética de su marca. Foto: Mango

Cuando era una Spice Girl veinteañera, Victoria Beckham proclamó que quería ser “tan famosa como Persil”. Ahora, al entrar en su sexta década, la estrella del pop convertida en diseñadora ha superado su objetivo.

El martes, su primera colección como diseñadora para la cadena de tiendas de moda Mango llegó a nivel mundial en línea y en tiendas selectas. A las 8 de la mañana en Londres, se había formado una fila frente a la tienda de la marca en Oxford Street, mientras los que estaban dentro luchaban por conseguir piezas hechas a medida, trajes de noche y joyas.

En una entrevista con WWD, Beckham dijo que había decidido trabajar con Mango para “hablar a un público más amplio de una manera que se sienta relevante para mi marca y conserve mi estética y mi ADN”. Los compradores que visitaban la tienda de Oxford Street eran principalmente millennials, que crecieron viendo a Beckham haciendo playback en los años 90. Si bien muchos no podían permitirse el lujo de gastar cuatro cifras en un blazer de la propia marca homónima de Beckham, lanzada en 2008, estaban dispuestos a gastar en uno de la colaboración de Mango por 180 libras esterlinas. “No tengo un presupuesto fijo para hoy”, dijo un comprador. “Me encanta la línea principal de Victoria, pero sólo puedo soñar con conseguir una pieza muy especial de ella. Esta colección significa que puedo tener varias”.

Deborah Ogden, experta en branding personal, dijo que la decisión de asociarse con el minorista masivo es parte de una estrategia más amplia. “La marca tiene que ver con la conexión y, mediante colaboraciones con Mango, está ampliando su audiencia y brindándoles la oportunidad de comprar su marca. Puede que sea un nivel básico, pero con el paso de los años esa relación puede crecer, por ejemplo, a través del maquillaje y, finalmente, de su marca de moda homónima”.

La colección de Beckham es la última de una serie de colaboraciones entre diseñadores de lujo presentadas por minoristas de moda rápida este mes. Si bien H&M se asoció con el diseñador emergente y vanguardista Rokh y & Other Stories se asoció con la caprichosa diseñadora china Susan Fang, todavía se pueden encontrar piezas de ambos en las tiendas. Aunque Mango fue a lo seguro eligiendo un nombre conocido y apoyándose fuertemente en lo que los compradores llamaron una “estética típica de VB” que consiste en una paleta de colores apagados y siluetas simples, es una estrategia que ha resultado fructífera. Al mediodía, Mango había agotado todas las joyas y se recomendó a los compradores que se unieran a una lista de espera para recibir piezas, incluido un vestido lencero negro de 170 libras esterlinas.

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Foto: Mango

La colaboración es un gran logro para Mango, pero Beckham estará igualmente satisfecha. Consolida su estatus, no sólo como diseñadora que ha llegado mucho más allá de la sagrada primera fila, sino también como una auténtica marca independiente. A su marido, David, se le puede atribuir el mérito de haber impulsado la “Brand Beckham” con sus anuncios de Pepsi y sus pantalones para H&M, pero es Victoria quien se ha ganado el apodo de la trabajadora más incansable de la moda.

En los primeros días de su carrera, forjó hábilmente su personalidad de Posh Spice, durante la década de 2000 se inclinó fuertemente hacia la estética Wag antes de retirar ese papel, incluido el bodycon brillante y los llamativos bolsos Birkin, en un intento de convertirse en una diseñadora de moda tomada en serio por la industria.

La juagada ha dado sus frutos. En 2022, decidió mantener su taller en el oeste de Londres pero volver a montar su exposición en París. Dos años después, sigue ocupando el codiciado lugar como el evento principal del viernes por la noche en la semana de la moda y Anna Wintour tiene un asiento habitual junto a David y los cuatro hijos de Beckham. Evolucionando más allá del prêt-à-porter, ahora también destacan las gafas, los bolsos, el maquillaje y las fragancias. El año pasado, la marca obtuvo ganancias por primera vez.

Una serie de Netflix lanzada en octubre pasado impulsó aún más la Brand Beckham a la estratosfera. Trazando la carrera futbolística de David, acumuló más de 3.8 millones de espectadores durante su primera semana, y los clips de las burlas de las parejas en pantalla se volvieron virales. Brand Beckham rápidamente convirtió los memes en mercancías, con camisetas de “La esposa de David” y “Mi papá tenía un Rolls-Royce” a la venta por 110 libras en victoriabeckham.com. La marca también se integra perfectamente en su vida personal. En la fiesta de su 50 cumpleaños el sábado, vistió a los invitados con prendas de su línea principal, incluida Salma Hayek, que asistió con su marido, François-Henri Pinault, director ejecutivo de Kering. Otros invitados, incluido Tom Cruise, recibieron bolsas de regalos que contenían velas con la marca Victoria Beckham y una camiseta estampada con la leyenda “Caramba, tengo cincuenta”. Reflexionando en una publicación en Instagram sobre cómo entrar en una nueva década, escribió: “¡Mi pasión siempre ha sido soñar en grande y luego soñar aún más en grande!”.

Muchos ahora creen que la quincuagenaria apenas está comenzando.

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