<i>Señorita 89</i> muestra ‘el poder y lo macabro’ de los certámenes de belleza
Edwarda Gurrola forma parte del elenco de la serie "Señorita 89". Foto: Captura

“Aquí ustedes no nos sirven ni marranas ni esqueléticas”, es una de las frases que se escucha en el adelanto de Señorita 89, una serie que se estrenará a través de Starzplay y que muestra lo “macabro” que hay detrás de los concursos de belleza.

La historia reconstruye el glamour la década de los 80 en México con un guion escrito por Lucía Puenzo, María Renée Prudencio y Tatiana Merenuk; la producción estuvo a cargo de Pablo y Juan de Dios Larraín.

La serie cuenta como 32 jóvenes reinas de belleza llegan a la Encantada, un lugar para convertirse en Miss México. Se trata de una estancia de tres meses, un tiempo en el que conocerán las relaciones de sumisión detrás de esos certámenes.

Señorita 89 cuenta con un elenco conformado por Ilse Salas, Natasha Dupeyrón, Bárbara López, Nuria Vega, Constanza Andrade, Ximena Romo y Edwarda Gurrola, quien habló en entrevista para La-Lista sobre su experiencia en esta serie.

Ella interpreta a Luisa Alcocer, mano derecha de Concepción. Este personaje ocupó en el pasado el título de “Miss Aguascalientes”, lo que la llevó a involucrarse con la matriarca del certamen de belleza. En esta narración se encarga de mantener a todas las participantes en orden.

Ser una especie de institutriz para estas jóvenes fue una experiencia interesante para la actriz no solo por el desarrollo que tiene su papel, sino porque se trata de un tema que calificó como difícil.

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Edwarda Gurrola interpreta en Señorita 89 a Luisa Alcocer, mano derecha de la matriarca del concurso de belleza. Foto: Cortesía

La actriz de Soy tu fan, Carrusel, Rebelde y Todo va a estar bien comentó que Señorita 89 también habla de la manera “como las mujeres vamos metiéndonos la pata a nosotras mismas y a las otras; también sobre este tema de la belleza y lo que tiene que ser lo bonito y lo que no lo es“.

Desde la ambientación hasta que fuera un contenido que va más a un thriller, hasta el abordaje de temas como la belleza y el cuerpo de la mujer fueron algunos de los motivos por los que decidió ponerse bajo las órdenes de Lucía Puenzo.

“Vemos los cuerpos y la belleza joven, pero detrás de esto está también el poder y lo macabro, mantener en una sumisión o en un papel secundario a cualquier tipo de persona que cuestione la hegemonía de este tipo de concursos y de dinámicas”, añadió la actriz.

La intérprete de Luisa Alcocer en Señorita 89 aplaudió que en Oaxaca fueran prohibidos los concursos de belleza en agosto de 2021, luego que tanto esos eventos como en la publicidad se fomentan estereotipos de cómo deben ser las mujeres.

“Eso es muy fuerte y como mujer lo vives en los anuncios. Todas son flacas, blancas, güeras, de ojos claros. Con esta constante parece que te bombardean todo el tiempo. Como mujer, desde niña, te llenan de estas ideas y después es muy difícil encontrar tu propio camino y valor“, comentó Edwarda Gurrola.

“Creo que ahí tenemos que echarle un poco más de cabeza para saber qué es lo que estamos enseñándole a nuestras niñas y niños”, agregó.

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“Como mujer, desde niña, te llenan de estas ideas y después es muy difícil encontrar tu propio camino y valor”, dijo Edwarda Gurrola. Foto: Cortesía

Edwada Gurrola aseguró que las nuevas producciones están empezando a derrumbar los estereotipos y que ya hay más oportunidades para actrices, pero estos cambios también se están empezando a dar en otros espacios, pues por una característica como la edad se cierran las puertas.

“Cuando eres mujer, si eres mamá o tienes más de tantos años, pues no (te dan un puesto de trabajo). Nos falta mucho por hacer, pero siento y quiero pensar que hay un cambio y una apertura”.

Aplaudió que las mujeres se estén manifestando no solo en contra de los estereotipos, sino de la violencia de género y los feminicidios, pues recordó que algunos de ellos son cometidos por sus parejas o familiares.

“A mí me interesa hasta qué punto hemos normalizado la violencia hacia la mujer, pero también cómo podemos enfrentarla (…) Creo que eso es bien delicado y me parece importante que las chavas estén diciendo basta ya. Estoy convencida que hay que protestar, porque no nos vamos a dejar que nos sigan matando“.

Las protestas no solo son contra los políticos hombres, sino también a las políticas porque se cuestiona “hasta qué punto tú también estás coludida en este sistema y cómo vamos a romper este tipo de normalizaciones de la violencia.

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