Alejandro Madrazo Lajous presenta su renuncia al CIDE

Alejandro Madrazo Lajous presentó su renuncia ante el Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) por denunciar prácticas intimidatorias y autoritarias, así como amenazas y acoso.

“No es poco a lo que renuncio. Son muchos años y muy buenos los que viví aquí. Es también mucha tristeza que siento al dejar mi casa, pero todo tiene un límite y para mí ya no hay posibilidad de permanecer sin ceder de más”, señaló el investigador del CIDE con sede en Aguascalientes a través de una carta en la que explica el motivo por el que decidió dejar el cargo.

Alejandro Madrazo Lajous aseguró que “nos están echando, haciendo de nuestra casa un lugar amenazante y hostil, a fin de purgar al CIDE de voces críticas al gobierno”.

Posteriormente declaró que las condiciones laborales en el Centro de Investigación se deterioran de forma acelerada, pues el gobierno “decidió destruir al CIDE. Tardé en verlo y en aceptarlo, pero hoy me resulta innegable”.

Además, comentó que en el ambiente laboral predomina un ambiente de intimidación contra las personas que expresan su descontento. Y comentó que los hechos lo convencieron de que todo se trata de un “castigo ejemplar de una institución que en muchos ámbitos ponía el ejemplo a seguir en pensamiento crítico e incidencia pública”.

El investigador detalló que los pagos retenidos son algunas de las prácticas que afectan a la comunidad, los órganos colegiales atropelladas y los derechos laborales no respetados, lo que provoca un ambiente de trabajo complicado. “Hoy, el espacio que antes nos protegía, es desde donde más intensamente se siente la amenaza”, agregó.

Madrazo Lajous sostuvo que las autoridades recorrieron al acoso y la intimidación administrativa ” a quien disiente y a la amenaza disciplinaria, velada, pero recurrente”.

Asimismo, otra vez criticó el nombramiento de José Romero Tellaeche, como director del CIDE, por calificarlo como “mediocre y servil, dispuesto a la ignorancia con tal de ostentarse” en el cargo y ante el rechazo de la comunidad.

También señaló una presunta discriminación sistemática por parte de quienes ofrecen cátedra en el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y reprobó la modificación de los estatutos.

“Son muchas carreras las que están destruyendo y es una injusticia y mezquindad lo que están haciendo”, dijo.

Además, detalló que la situación “es resultado de una decisión política. Si acaso, el romerazo debe servir como una alerta a toda la comunidad académica nacional sobre los peligros de tolerar la simulación en su seno”.

Finalmente se despidió de la comunidad estudiantil y sus colegas, pues la crisis “es nacional y previa a la virulencia con la que el gobierno actual acosa a la academia. Les deseo paciencia, resiliencia y una pronta liberación del actual pestilencia”.