El hambre ya causa muchas muertes y daños irreversibles en Gaza
Palestinos esperan ayuda alimentaria en Deir al-Balah, Gaza, en mayo. Foto: Anadolu/Getty Images

Meses de hambre extrema ya han matado a muchos palestinos en Gaza y han causado daños permanentes a niños por desnutrición, según dos nuevos informes sobre seguridad alimentaria, incluso antes de que se declare oficialmente la hambruna.

La red del sistema de alerta temprana de hambrunas (Fews Net), con sede en Estados Unidos, afirmó que era “posible, si no probable”, que la hambruna comenzara en el norte de Gaza en abril. Dos organizaciones de la ONU afirmaron que “se espera que más de un millón de personas se enfrenten a la muerte y el hambre” a mediados de julio.

La guerra complica la recopilación de datos que confirmarían el comienzo de la hambruna. Pero centrarse únicamente en si Gaza superó el momento en que el hambre extrema se convierte en una declaración oficial de hambruna podría ocultar el altísimo número de víctimas que la escasez de alimentos ya ha causado entre los palestinos, según ambas organizaciones.

“Independientemente de si se han alcanzado o superado definitivamente los umbrales de hambruna (fase 5 de la CIP), la gente está muriendo por causas relacionadas con el hambre en toda Gaza”, señala el informe de Fews Net. “La desnutrición aguda entre los niños es extremadamente alta y esto provocará impactos fisiológicos irreversibles”.

“La pérdida generalizada de vidas todavía está asociada con resultados ‘cercanos’ a los umbrales de hambruna, y si se prolonga durante un largo periodo de tiempo, entonces la pérdida acumulada de vidas puede alcanzar niveles que son potencialmente tan altos o más altos (dependiendo de la duración) en comparación con la pérdida de vidas asociada con el hambre”.

Los expertos de la red, creada por Estados Unidos en la década de 1980 para alertar de crisis inminentes, declararon inicialmente que era “probable” que la hambruna estuviera en proceso en el norte de Gaza desde abril.

El término hambruna, cuando es utilizado por los profesionales de la ayuda alimentaria y de emergencia, tiene una definición técnica estricta, con tres condiciones que deben cumplirse en una zona. El alto umbral significa que para cuando se declare la hambruna, muchas personas ya habrán muerto de hambre.

Según la definición técnica de hambruna, el 20% de los hogares deben sufrir una carencia extrema de alimentos, o esencialmente estar muriéndose de hambre. Un tercio de los niños debe sufrir malnutrición aguda o emaciación, y dos adultos o cuatro niños por cada 10 mil personas deben morir diariamente de hambre y sus complicaciones.

El grupo de revisión de la hambruna del CIP, un organismo externo que normalmente confirmaría o rechazaría las conclusiones iniciales, tomó la insólita decisión de que no había datos suficientes para hacer ninguna de las dos cosas.

Según el informe, la investigación se vio bloqueada por “el conflicto y las limitaciones de acceso a la ayuda humanitaria”. La entrada a Gaza está controlada por las autoridades israelíes, los desplazamientos requieren permiso militar, las carreteras están dañadas por los escombros, el combustible escasea y las redes eléctricas y de comunicaciones apenas funcionan.

Por ello, el informe final tiene en cuenta “las pruebas disponibles y las lagunas de información conocidas”, y declara “posible, si no probable, que los tres umbrales de la CIP para la hambruna (consumo de alimentos, desnutrición aguda y mortalidad) se hayan alcanzado o superado en el norte de Gaza en abril”.

El jefe de ayuda humanitaria de la ONU dijo que se estaba haciendo poco para evitar una catástrofe cada vez mayor. “En Gaza, la entrega de ayuda se ha vuelto casi imposible”, afirmó Martin Griffiths en un post en X.

“No estamos ni cerca de donde deberíamos estar. Necesitamos que se abran todos los pasos fronterizos. Necesitamos un acceso seguro y sin obstáculos. Necesitamos dar prioridad a la ayuda humanitaria”.

El Programa Mundial de Alimentos y la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación, en su informe Hunger Hotspots sobre la inseguridad alimentaria en el mundo, también advirtieron de los estragos que está causando el hambre, incluso sin una declaración de hambruna.

“A falta de un cese de las hostilidades y un mayor acceso, el impacto sobre la mortalidad y la vida de los palestinos ahora, y en las generaciones futuras, aumentará notablemente cada día, incluso si se evita la hambruna en un corto plazo”, señala el informe.

Los nuevos pasos fronterizos que permiten la entrada de ayuda en el norte de Gaza han mejorado ligeramente el acceso a los suministros de alimentos desde mayo. Pero en el sur, la crisis se está agravando después de que una ofensiva militar israelí en Rafah cortara las principales vías de entrada de la ayuda; se han registrado al menos dos muertes infantiles por desnutrición.

Médicos Sin Fronteras declaró el miércoles que los combates parecían haberse intensificado en el centro de Gaza y que el hospital de Al Aqsa se había visto desbordado por el número de víctimas tras los intensos ataques aéreos israelíes.

Al menos 70 muertos y más de 300 heridos fueron ingresados para recibir tratamiento, llevando al maltrecho sistema médico al punto del colapso. Con el paso de Rafah a Egipto cerrado, ya no hay evacuaciones médicas para los heridos más graves.

“El olor a sangre en la sala de urgencias del hospital esta mañana era insoportable. Hay gente tirada por todas partes, en el suelo, afuera”, dijo Karin Huster, referente médico de MSF en Gaza. “Traían cadáveres en bolsas de plástico. La situación es abrumadora”.

Traducción: Ligia M. Oliver

Síguenos en

Google News
Flipboard