‘Project 2025’: el plan de grupos conservadores para desmantelar la política climática de EU
La refinería de petróleo de ExxonMobil en Baton Rouge. El Project 2025 (Proyecto 2025) fortalecería la industria del petróleo y el gas y eliminaría la Agencia de Protección Ambiental. Foto: Barry Lewis/In Pictures/Getty Images

Una alianza de grupos derechistas redactó una extensa propuesta presidencial cuyo objetivo es reforzar la industria del petróleo y el gas, que calientan el planeta, y obstaculizar la transición energética, según se reveló.

En un contexto de calor e inundaciones récord este año, la iniciativa de 22 millones de dólares (unos 300 millones de pesos), el Project 2025 (Proyecto 2025), fue impulsada por el infame centro de estudios derechista que niega el cambio climático, el Heritage Foundation, vinculado al multimillonario del sector de los combustibles fósiles Charles Koch.

Denominado Mandato para el Liderazgo: La Promesa Conservadora (Mandate for Leadership: The Conservative Promise), pretende guiar los primeros 180 días de gobierno de un presidente republicano entrante. Expertos y activistas climáticos criticaron el plan que desmantelaría la política climática estadounidense.

La guía de transición, de casi mil páginas, fue redactada por más de 350 personas derechistas y está repleta de recomendaciones de gran alcance que pretenden desmantelar todos los sectores del gobierno federal, incluida la política ambiental.

“Heritage está convocando al movimiento conservador detrás de las políticas para garantizar que el próximo presidente disponga de la política adecuada y del personal necesario para desmantelar el Estado administrativo y devolver el autogobierno al pueblo estadounidense”, indicó el presidente de la fundación, Kevin Roberts, en un comunicado emitido en abril.

El capítulo de la guía relativo al Departamento de Energía de Estados Unidos propone cerrar tres oficinas de la agencia que son cruciales para la transición energética, y también pide que se recorte radicalmente el financiamiento destinado a la división de despliegue de redes de la agencia, en un esfuerzo por impedir el despliegue de las energías renovables, según informó E&E News esta semana.

El plan, que ampliaría enormemente la infraestructura de gas, fue escrito por Bernard McNamee, un exfuncionario de la agencia. Además, Trump designó a McNamee como miembro de la Comisión Federal Reguladora de Energía. Anteriormente dirigió la fundación de extrema derecha Texas Public Policy Foundation, que lucha contra la regulación ambiental, y trabajó como asesor principal del senador republicano Ted Cruz.

Otro capítulo aborda el desmantelamiento de la Agencia de Protección Ambiental (EPA) y cómo desviar su atención de la crisis climática. Propone reducir las funciones de justicia ambiental y participación pública de la agencia, y al mismo tiempo reducirla en su conjunto mediante la terminación de nuevas contrataciones de personal para “programas de bajo valor”, informó E&E News. La propuesta fue redactada por Mandy Gunasekara, que fue jefa de personal de la EPA durante la presidencia de Trump.

La guía también incluye un capítulo sobre el Departamento del Interior escrito por William Perry Pendley, quien polémicamente dirigió la Oficina de Administración de Tierras durante la presidencia de Trump y trabajó para eliminar las regulaciones relacionadas con la perforación.

“Los republicanos del Congreso siguen demostrando que nada los detendrá para socavar las protecciones ambientales”.

David Shadburn de la Liga de Votantes por la Conservación

Antes de su paso por el gobierno de Trump, Pendley dirigió Mountain States Legal Foundation, un despacho de abogados conservador en el que abogó por la venta de tierras públicas. También es autor de un libro, Sagebrush Rebel, en el que elogió las políticas antirreguladoras de Reagan.

“Él hizo un montón de cosas terribles”, comentó Kert Davies, director de investigaciones especiales del Center for Climate Integrity, sobre el tiempo que Pendley estuvo en el Departamento del Interior. “Trabajó para desmantelar (la Oficina de Administración de Tierras) cuando estuvo ahí”.

Heritage Foundation ha ejercido una larga influencia en la política del Partido Republicano, e incluso ayudó a Ronald Reagan a ganar la presidencia, según detallan los escritores Naomi Oreskes y Erik M. Conway en su libro de 2023, The Big Myth. Muchas de las propuestas políticas de Reagan procedían de las páginas del primer Mandato para el Liderazgo del centro de estudios, publicado en 1980, en el que se afirmaba que Estados Unidos se encontraba en medio de una “crisis de exceso de regulación”.

“No me preocupa que una persona o institución elabore planes de asesoría para los políticos. Lo que me preocupa es el largo historial de Heritage Foundation… de trabajar para socavar la protección ambiental a costa de la salud y el bienestar del pueblo estadounidense, a expensas de la vida en la Tierra”, señaló Oreskes, profesora de Historia de la Ciencia en Harvard.

‘Project 2025’: el plan de grupos conservadores para desmantelar la política climática de EU - manifestantes-exigiendo-al-gobierno-de-biden-que-tome-mas-medidas-para-frenar-el-cambio-climatico
Manifestantes en octubre de 2021 exigiendo al gobierno de Biden que tome más medidas para frenar el cambio climático y que prohíba los combustibles fósiles. Foto: Kevin Dietsch/Getty Images

Entretanto, los miembros del Partido Republicano de la Cámara de Representantes también siguen arremetiendo contra los fondos federales para el clima en sus propuestas de ley de gastos, poniendo en peligro las funciones gubernamentales.

A principios de este mes, la Clean Budget Coalition (Coalición por un Presupuesto Limpio) –integrada por más de 250 grupos de defensa– advirtió que los representantes republicanos estaban incluyendo restricciones sobre el gasto climático en los proyectos de ley de gasto anual del gobierno, proyectos que se deben aprobar antes de que expire el financiamiento actual el 30 de septiembre para evitar la paralización del gobierno. Esta semana, la coalición descubrió que los republicanos de la Cámara de Representantes incorporaron nuevas “píldoras venenosas” en los proyectos de ley de gastos, incluidas algunas que tienen como objetivo los fondos destinados al medio ambiente.

Los proyectos de ley de gastos actualmente se están debatiendo en el Comité de Asignaciones de la Cámara de Representantes, presidido por la diputada republicana de Texas Kay Granger, que es una de las principales beneficiarias del financiamiento de campañas procedente de la industria del petróleo y el gas, según informó el periódico Lever esta semana. Los proyectos serán sometidos a votación en la Cámara de Representantes y, una vez finalizados, comenzarán las negociaciones con el Senado. Si Biden los veta, se podría avecinar la paralización del gobierno.

“Los republicanos del Congreso siguen demostrando que nada los detendrá para socavar la protección del ambiente y que atacarán todo lo que contribuya a hacer frente a la crisis climática”, señaló David Shadburn, defensor responsable de asuntos gubernamentales de la Liga de Votantes por la Conservación.

Algunas de las disposiciones obstaculizarían las competencias de la EPA, impidiéndole imponer nuevos límites de contaminación a las plantas de energía y de las emisiones de los tubos de escape o impidiéndole aplicar controles en relación con el mercurio y otros contaminantes tóxicos del aire, y cerrando efectivamente un programa fundamental para el despliegue de energía libre de carbono”.

“Los republicanos de la Cámara de Representantes están abusando del proceso de asignación de fondos para imponer un ciclo de injusticia ambiental”, señaló Deanna Noël, directora de campañas contra el cambio climático de la organización de defensa del consumidor sin fines de lucro Public Citizen.

Otras “píldoras venenosas” prohibirían la inclusión de la lagartija espinosa de las dunas en la Ley de especies en peligro de extinción, eliminarían la protección de la población de osos pardos del ecosistema de Yellowstone y prohibirían que el Departamento de Interior creara un grupo de trabajo que ayude a restablecer las poblaciones de bisontes. Otras exigirían al secretario de Energía que vendiera un millón de barriles de petróleo refinado procedentes de la Reserva Estratégica de Petróleo y bloquearían la aplicación de una norma que obliga a los contratistas federales de defensa a revelar sus emisiones de gases de efecto invernadero y a elaborar planes de reducción de emisiones.

“Estas vergonzosas píldoras venenosas no son más que regalos corporativos para la industria corrupta de los combustibles fósiles”. Deanna Noël, de Public Citizen

Todos los representantes del Partido Republicano pueden presentar propuestas al comité de asignaciones de la Cámara de Representantes, y dado que ningún miembro está obligado a aprobar propuestas concretas, se desconoce quién es exactamente el responsable de cada “píldora venenosa”. Sin embargo, como informó Lever, muchos representantes republicanos que defienden efectivamente estas disposiciones reciben fondos de industrias contaminantes.

Por ejemplo, una propuesta cuyo objetivo es detener el financiamiento de la investigación pesquera relacionada con el cambio climático fue redactada por un subcomité dirigido por el representante Hal Rogers, de Kentucky, entre cuyos principales contribuyentes de campaña se encuentran intereses mineros y de combustibles fósiles. Otra propuesta que prohibiría el financiamiento del Fondo Verde del Clima de la ONU quedó relegada a un segundo plano en un proyecto de ley supervisado por el representante Mario Díaz-Balart, de Florida, uno de los principales receptores de fondos del sector energético, informó Lever.

“Estas vergonzosas píldoras venenosas no son más que regalos corporativos para la corrupta industria de los combustibles fósiles”, señaló Noël.

Estas propuestas aparecen en un momento en que las aguas de la costa de Florida alcanzan niveles de calor propios de los jacuzzis, y en el que gran parte del país sigue sofocado bajo temperaturas de tres dígitos.

Síguenos en

Google News
Flipboard