Jeff Norris dice que sus alumnos estudian la naturaleza desde la naturaleza

En febrero de este año, una noticia saltaba en la prensa de Costa Rica con el siguiente titular: “Estudiante del Bajo Los Anonos asistirá con beca al mismo colegio que una princesa española en Gales”. El primero es Sebastián M. Buzo y la segunda, la princesa de Asturias, Leonor de Borbón. El próximo mes de agosto, iniciarán juntos la preparatoria en el United World College (UWC) Atlantic College de Gales.

El UWC es una institución educativa formada por 18 escuelas en cuatro continentes. Su educación se basa en valores como la interculturalidad y el aprecio de lo que es diferente. Por eso, becan al 75% de los estudiantes, para que cualquiera pueda acudir a un campus donde se forman princesas, literalmente (además de Leonor de Borbón, la princesa Alexia de Holanda también estudiará el bachillerato en la escuela de la UWC de Gales en el próximo curso). 

La única escuela en América Latina está en Costa Rica. Ahí el encargado de la asignatura de Biología es un estadounidense que después de 27 años viviendo en el pequeño país, no quiere irse porque aún no conoce toda su naturaleza.

Se llama Jeff Norris y se ha dado a conocer por su método educativo: si quieres aprender sobre los seres vivos, convive con ellos. Platiqué con él porque veo la biología como ese manual de instrucciones de la Vida que a veces creemos que hemos olvidado o que aún tenemos que aprender.

Por cierto, UWC México extendió por 10 días la convocatoria de becas para estudiantes aspirantes del curso 2022-2024. ¡Suerte!

¿Por qué Costa Rica?

Amo la biología. Crecí en el medio oeste de Estados Unidos, por Chicago, y sentía que conocía toda la naturaleza que había ahí. Quería vivir en un sitio que fuera diferente. Me fui a Costa Rica y aún no conozco toda naturaleza que hay ahí, por eso me quedé. Cuanto más la conozco, más me doy cuenta de que tienes que apreciarla y entenderla por tu propia cuenta. 

¿Por qué dices esto?

Yo puedo preguntarte, ¿por qué es importante la naturaleza para ti? 

Porque me gusta saber que hay seres vivos diferentes de los humanos.

Y ¿por qué eso es importante para ti?

Me hace sentir parte de una comunidad mayor que yo.

Entonces, si tú no lo experimentas por ti misma, ¿qué valor tienen mis palabras? Por eso quiero que mis estudiantes salgan afuera y que aprendan cosas más profundas que tienen que experimentar por sí mismos. Por eso una de mis actividades es que estudien la naturaleza desde la naturaleza.

¿Qué ha observado que aprenden sus alumnos cuando lo hacen?

Una vez los saqué para que reflexionaran sobre cualquier cosa, a inicios de este año. A veces me gusta pasear para ver qué hacen y me siento a platicar con ellos. Una chica estaba tumbada en la yerba, llorando. Solo me dijo: “Tenía muchas cosas adentro. Estar en silencio en la naturaleza me colapsó. Es exactamente lo que necesitaba, estar sola y pensar en mi”. 

Vaya…

Me hubiera gustado que esa estudiante hubiera aprendido sobre pájaros y todo eso, pero me encantan estas conexiones emocionales que hacen. Cada uno tiene sus respuestas cuando salen al aire libre y nunca puedo planear cuál será la lección. Ahora, cuando regresamos a clase, intento conectarlo todo con el plan de estudios. Son las relaciones lo que importa. 

Por eso dicen que usted no es un profesor al uso.

Este será mi onceavo año en la escuela. En los últimos diez, he ido transicionando desde lo que se considera un maestro más tradicional, centrado en el currículum, hacia un maestro más centrado en el estudiante. En un curriculum tradicional, el profesor está enfrente de la clase hablando por 45 minutos. No sé cómo fue en tu caso…

Exactamente así.

Eso se llama transmisión. Viene de hace siglos. Antes, si querías información, tenías que ir a un maestro. Pero luego llegaron las bibliotecas y luego el Internet, así que los maestros ya no controlamos la información. En los últimos diez años he aceptado que no lo sé todo pero lo que puedo hacer es compartir mis entendimientos con otros. 

Y ¿qué piensan sus alumnos de eso?

En nuestra escuela tenemos la suerte que los alumnos llegan con esperanza, quieren cambiarse a sí mismos y hacer del mundo un lugar mejor. Lo que yo hago es bajar de la cima de la montaña, me siento con ellos y les digo: “Vamos a buscar tu propia montaña y deja que te ayude a escalarla”.

Creo que demasiados maestros e instituciones aún ven el libro o el currículum como un objetivo. En mi caso, el plan de estudios es una herramienta. A través de ella accedo a mis alumnos. 

¿Cómo logras que se apasionen por la biología?

No es que se apasionen, mi objetivo es que la valoren y una forma de hacerlo es tratando que entiendan cómo la biología será importante para lo que ellos quieran hacer en un futuro.

Si alguno quiere ser periodista, ¿qué le dirías?

Pienso Donald Trump y los cambios en la Agencia de Protección del Medio Ambiente. Entonces le retaría: “¿Cuáles son los efectos de estos cambios en el medio ambiente?” y en vez de hacer un test le pediría que escribiera algo. Hay una gran variedad de cosas interesantes de las que los políticos tienen que tomar decisiones, como la modificación genética. De hecho, me estoy emocionando con la idea de que en el próximo semestre un alumno me diga que quiere ser periodista. 

Es decir, podemos usar la biología para entender mejor el mundo.

La biología nos conecta con todo. Entender la genética de cada especie es entender la historia de su evolución. Además, no puedes estudiar nada aislado porque todo está conectado. Si quieres estudiar los animales, mejor que sepas algo de plantas.

¿Y una lección útil para la vida?

Cuando hay una sequía, las áreas que tenían variedad de plantas sobreviven mejor a la falta de agua que las que no, por cómo el agua se almacena y se usa por parte de cada planta. En Costa Rica, en las plantaciones de café, puedes obtener un 15% más de producción en áreas cerca de bosques, porque ahí hay polinizadores. Por tanto, la diversidad es mejor que la homogeneidad porque da estabilidad y resiliencia.