Morena sin AMLO

Con Andrés Manuel López Obrador al frente, Morena está por cumplir ocho años como partido político, once años como movimiento, y el próximo 5 de junio podría tener gobernadores (as) en dos terceras partes del país (22 o 23 estados).

Sus ideólogos hoy pueden sacar la calculadora, ver al futuro, y sonreír porque retener el poder en 2024 está más cerca que lejos.

Hoy en los estados no importa quién se postule. Si tiene la marca Morena es visto en automático como un cambio por un sector de la población. Por eso todas las encuestas apuntan que ganarán de forma holgada en Quintana Roo, Oaxaca, Tamaulipas, e incluso Hidalgo, bastión del PRI. Además de que los números apuntan a empate técnico o elección cerrada en Durango y Aguascalientes.

Todos los candidatos han usado de alguna manera la figura del presidente: “voy a trabajar con ya saben quién”, “vamos a aplicar la política de ya saben quién”, “como dice ya saben quién”, se les escucha en entrevistas o mítines. Y repiten básicamente la misma fórmula de la campaña lopezobradorista: combatir la corrupción, primero los pobres, gobierno del pueblo.

Todos los candidatos o candidatas intentan hablar o responden como AMLO: todo es un ataque de los adversarios, del PRI, del PAN o la mafia o de los medios. Ahí está por ejemplo la candidata en Aguascalientes, Nora Ruvalcaba, quien para contestar si era verdad o no un reportaje difundido el jueves por Carlos Loret, se aventó un spot político con el siguiente mensaje: “Todo México sabe los intereses que representas @CarlosLoret, sabemos que te vendes al único postor, el PRIAN. Aguascalientes ya despertó y tus mentiras las disciernen oídos informados, conscientes. Les duele que el pueblo gane, pero hasta aquí llegó su cinismo y su corrupción”.

Como podrá notarse, en los estados están replicándose pequeños López Obradores.

La pregunta es: ¿qué van a hacer a partir del 1 de octubre 2024? No es una fecha lejana, sólo faltan 2 años y 4 meses.

¿Cuáles son los nuevos cuadros de Morena? (No me digan que Antonio Attolini)

¿Qué liderazgos tienen formados? (No me digan que es Epigmenio Ibarra)

¿Pueden enlistar a 10 promesas para el futuro? Bueno, cinco nada más.

Fuera del discurso que podemos aprender en las conferencias mañaneras, ¿de qué se nutre el partido en el poder?

¿Cuál es el proyecto a seguir cuando Morena se quede sin AMLO?

Son preguntas no para el presidente sino para quienes lo prosiguen. Y no podrán responderlas desde el adoctrinamiento o la división que les caracteriza.

¿Qué país seremos después de AMLO? Porque, rotos, divididos, polarizados, como sea, aquí seguimos en el mismo barco.

Como dice Sabina Berman: “La Patria son hospitales públicos bien equipados. Escuelas limpias donde se venera con lápiz y goma al conocimiento. Comedores gratuitos con ollas de barro calientes para quienes tienen hambre. Refugios para quienes no tienen camas”.

¿Acaso hacia allá vamos?

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