Amigous

Parece una analogía, pero no. La virtual reunión entre Biden y López Obrador fue virtual. Y es que si uno lo piensa: virtual ha sido la buena relación entre EUA y México, virtual la buena vecindad, somos el virtual patio trasero, son el virtual patrón Sam, virtuales nuestras peleas y virtualmente nos han aplicado “la de coopelas o cuellos”.

Dejaré el princio al final y comienzo con esto que dijo después de la reunión el Presidente López Obrador:

“Tenemos que cooperar”, saludos a Zhenli Ye Gon, “para el desarrollo con independencia, con autonomía, potenciándolo, todo lo que significa, sobre todo el pueblo de América del Norte que es el motor del cambio, nuestro pueblo”. Nomás digo que hay una delgada línea entre “cooperar” y “ponernos de tapete”.

Y es que EUA no es una casa de beneficiencia, ni Joe Biden un considerado con México. Son rapaces las intenciones de ambos gobiernos, solo que la ventaja de uno siempre pesa sobre el otro. Adivine quién es “el otro” en esta y todas las historias.

En la reunión virtual AMLO se arrancó una sonrisa a Biden, que en estos contextos, uno no sabe si es real o fingida diplomáticamente:

“Decía un presidente mexicano”, dijo el tabasqeuño al que le gusta recordar/reecribir/cambiar/trastabillar la Historia de México “que duró poco en el gobierno, dominó por 34 años”, y no, no fue Carlos Salinas de Gortari, sino Porfirio Día “entonces se le atribuye a él una frase, a Porfirio Díaz, decía: ‘Pobre México, tan lejos de Dios y tan cerca de Estados Unidos’”, ni Maradona metía su mano por México. Y aquí es donde López Obrador se lució: “ahora puedo decir ‘Bendito México, tan cerca de Dios y no tan lejos de Estados Unidos’”, Biden casi escupe el agua que bebía, nomás de la risa.

Después del encuentro, que no sabemos profundamente de qué trató, sino que las comunicaciones generales de ambos fueron más ambiguas que el Lago de Texcoco que ibamos a salvar si no construíamos el Aeropuerto Internacional de Peña Nieto.

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Pero lo que sí fue más clara que ambigüa, fue la respuesta/norespuesta de Biden cuando una reportera le preguntó antes de entrar a la reunión privada entre ambas representaciones:

-Mr. President, are you sending vaccines to Mexico? 

Y el quita risas corrió a cargo de Biden:

-We’re going to talk about that.

Y sobre vacunas ni una sola palabra en los comunicados después de la reunión. Antes, la vocera del gobierno de Biden había dicho que “naranjas”, que no estaba en los planes darnos una limosnita de vacunas por el amor de Dios.

Para ser franco, me pregunto: ¿Qué diría a todo esto Porfirio Díaz?