Pros y contras de las bicicletas sin pedales
Pros y contras de las bicicletas sin pedales. Imagen: Samantha Guerrero

Hay todo tipo de bicicletas: chicas y grandes, con canastas al frente, con chicharra, con luces, con asiento trasero, con rueditas, un sinfín de modelos… incluso hay algunas sin pedales, tal vez las has visto, pero ¿sabes cuáles son los pros y contras de estas?

Pros y contras de las bicicletas sin pedales

Las bicicletas sin pedales son utilizadas en su mayoría por niños pequeños y en algunos casos en adultos mayores. Estos juguetes para transportarse tienen más pros que contras, según los especialistas consultados por La-Lista.  

Patricia Quezada, licenciada en Nutrición Humana y en Ciencias del Deporte, señala que en sí las bicicletas son un buen ejercicio porque se mueven los músculos grandes, en este caso las piernas.

“Tanto en adultos como en niños, ayuda a la coordinación, a que tengamos una buena motricidad, a que podamos medir el espacio, entonces para los dos es una muy buena opción”, comenta Quezada y recomienda implementar las bicicletas sin pedales solo si al menor o al adulto le gustan.

Asimismo, podría ayudar en temas de rehabilitación, recuperar fuerza en las piernas, mejorar el equilibrio y recuperar la confianza. 

“Cuando encontramos algo que nos gusta, nos divierte o nos apasiona, siempre va a ser una muy buena opción. Por ejemplo, en el caso de los adultos mayores, les ayuda al equilibrio en brazos, en poder maniobrar, moverse con sus piernas porque cuando envejecemos vamos perdiendo ciertas habilidades”, señala Quezada.

En el caso de los niños, comenta que los mantienen activos y es una actividad muy divertida. “Y al verlo como un juego hace que quieran hacerlo más y eso nos ayuda a que sigan activos, a que sigan desarrollando sus músculos”, explica. 

Bicis sin pedales en niñas y niños

Alejandro García Robles Ortiz, médico cirujano egresado de la Universidad Anáhuac y pediatra por el Hospital Infantil Privado, avalado por la UNAM, explica que en las bicicletas sin pedales la única forma de propulsión es a partir de las piernas del niño. 

“En inglés se les llaman Balance Bike (bicis de balance) y la idea es desarrollar y afinar el motor grueso de los niños (caminar, correr, saltar, levantar cosas, dar marometas), esto les permite mejorar el equilibrio, desarrollar ciertas habilidades neuromotoras de forma rápida e intuitiva, como es una posición anatómica que ya conocemos: estar parados, pero ahora tienes es un punto extra de apoyo, el asiento y el volante para dirigir el vehículo”, dice el pediatra. 

Otras ventajas que dan son el desarrollo en la confianza y seguridad de los menores, adquirir fuerza y estabilidad, tendrán mayor facilidad para correr, saltar, escalar o para hacer cierto tipo de movimientos con las piernas.

“Entonces les va a ayudar, por ejemplo, para deportes como el futbol o cualquier deporte que requiera patear un balón o utilizar los pies porque van a tener este desarrollo adelantado que normalmente vamos aprendiendo paso por paso”, dice el doctor García.

Aconseja que estas bicis se utilicen previo a las bicicletas con pedales, patineta, monopatín, triciclos para garantizar que los niños tengan un mejor desarrollo. 

“Cuando lo cambias de una bici sin pedales a una convencional es extraordinariamente fácil, porque el niño ya tiene todas estas habilidades que nosotros en nuestros tiempos aprendíamos ya hasta que te subías a la bicicleta”, dice.

¿A qué edad pueden usar los niños bicis sin pedales?

De acuerdo con el pediatra lo que se necesita para utilizar estas bicis es que tengas la estatura para que te quede la bici. 

“Yo recomendaría a partir de los 18 meses si el niño ha tenido un buen neurodesarrollo, es decir, que ya sepa caminar. Los niños normalmente después del año y medio ya caminan, tienen una marcha mucho más estable”, dice. 

La bicicleta sin pedales se recomienda utilizarla por alrededor de dos años o hasta que el menor tenga la estatura para poder utilizar una bici con pedales.    

En el caso de los triciclos no es algo que recomiende al 100%, para fines de diversión sí, pero es un vehículo que es más difícil de maniobrar porque las ruedas traseras proporcionan un equilibrio falso.

“El niño tiene que estar cuidando que las ruedas no se atoren, tiene que manejarse en terrenos completamente planos y él no está ejerciendo ningún tipo de fuerza con su cuerpo para mantener el equilibrio, a diferencia de la bicicleta o la bici sin pedales”, comenta.

¿Cuándo no es recomendable la bicicleta sin pedales?

En los casos donde el pediatra recomienda una mayor vigilancia o tomarlo a consideración son si el niño se tardó en caminar, si tiene crisis de ausencias o cierto tipo de crisis convulsivas, con trastorno en el espectro autista o si existe alguna malformación en el pie, en la cadera, espalda o brazos. 

“Tenemos que tener claro que es un juguete y que debe ser usado con supervisión. Hay que asegurarnos que la bici sin pedales que compres sea de alguna marca reconocida y avalada por la Asociación Americana de Pediatría y la Asociación Americana de Ortopedia Pediátrica”, recomienda García.

Dentro de los contras que podrían existir están los accidentes o caídas, por lo que se aconseja usar protección para minimizar los riesgos. 

“Si el niño que no usa la bici sin pedales no se queda chueco, no va a tener problemas del desarrollo, no nada. Esto es solo un plus”, finaliza.

Síguenos en

Google News
Flipboard